Carta a mi amigo Nolito

Quién te lo iba a decir, Nolo. Tú que saliste de esa familia humilde de Sanlúcar de Barrameda. Tú que siempre has conservado la sencillez y has luchado para llegar a lo más alto. Y ahora te consagras en esta Eurocopa. Deslumbras con tu calidad, pero demuestras que con trabajo y esfuerzo también se puede llegar. Anoche, con una asistencia magistral y luego con ese gol de matador contra la selección turca. Vuelves a dejar claro, esta vez en el mejor escenario, que tu éxito tampoco es casualidad.

- Abrazo con Íker

Marcaste y tus compañeros lo celebraron casi más que tú. Ellos saben lo mucho que te lo has currado para llegar hasta aquí. En tu carrera hacia Casillas señalaste al cielo. Desde allí, tu abuelo sonríe orgulloso. Cuántas tardes acompañándote al fútbol, cuántos consejos, cuánto cariño. Y llegas a Íker, el portero te abraza. Tu felicidad es la suya, la nuestra, la de todos. El capitán reconoce tu gol, pero también tu entrega hasta tocar la gloria. Te lo mereces, Nolo. Paso a paso has ido creciendo. Pocos pensaban que desde un club como el Celta llegaría la llamada de Del Bosque. Pero el seleccionador fue valiente, creyó en ti, y no has fallado. Tampoco fallaste a Casillas, él te picó y tú marcaste. Hoy más que nunca todos somos Nolito.

- Queda lo mejor

Porque cuando caíste te levantaste, cuando saliste de un grande como el Barça no te importó seguir creciendo en otro equipo. Sabías que todo dependía de ti. Y ahora lo has demostrado. Queda mucha Eurocopa por delante, ya eres indiscutible en este once de Del Bosque. Disfruta del momento mientras los grandes de Europa siguen llamando a tu puerta. Tú te lo tomas con una sonrisa y sólo te preocupa que a los tuyos no les falte de nada. Que no pasen por lo que viviste. A pesar de que haya sido un mal necesario para llegar a este punto. Los chavales deben tomarte como el ejemplo a seguir. Los sueños se cumplen. Felicidades, amigo.