Una final en la grada

La UEFA sanciona con cuatro partidos a Simeone por su expulsión y los insultos al árbitro en Londres. En Lyon sufrirá desde un palco

Acabaron las semifinales de la Liga Europa contra el Arsenal, y cuando se retiraron los jugadores, eufóricos porque van a pelear por conquistar otro título, los espectadores del Wanda Metropolitano, casi todos, porque nadie se quiso marchar en plena fiesta, se giraron hacia donde estaba su entrenador. «Ole, ole, Cholo Simeone», cantaron al unísono, agitando las bufandas. El técnico vivió el partido desde un palco como si fuera un hincha más, con los gestos calcados a los de la mayoría de los seguidores: cara de sufrimiento con las ocasiones en contra, lamento con las falladas y alegría tras el gol de Diego Costa. Cumplía el argentino el primer partido de sanción por la roja que vio en la ida en Londres, en el Emirates Stadium. Ayer conoció el castigo completo: cuatro partidos (incluido el del jueves) sin sentarse en el banquillo, además de una multa de 10.000 euros.

Tendrá que vivir desde «fuera», por tanto, la gran final de la Liga Europa, el próximo 16 de mayo contra el Marsella en Lyon. El Atlético recurrirá la sanción, pero en caso de que se la reduzca no parece probable que le quiten más de un encuentro, de ahí que la final se la pierde sí o sí. En caso de ganar el título, el siguiente duelo en el que el Cholo no dirigiría a los suyos desde el césped sería la Supercopa de Europa, en Tallin. La sanción finalizará en la próxima Champions, para la que los rojiblancos ya están clasificados.

Además de a Simeone, la UEFA también sancionó al Atlético con 10.000 euros por lanzamiento de objetos, también en el duelo del Emirates.