El Sevilla pone la directa

El Sevilla se ha impuesto al Granada (3-0) en el partido correspondiente a la vigésimo primera jornada de la Liga BBVA, disputado este lunes en el Ramón Sánchez Pizjuán, un resultado que permite a los de Emery encadenar su cuarto partido consecutivos sin caer derrotados, justo desde que el vasco ocupa el banquillo de Nervión, mientras que los nazaríes se quedan al filo del descenso.

El partido fue un claro dominio hispalense. Los de Emery jugaron mucho mejor que los hombres de Anquela y demostraron que su lugar en la clasificación es pura anécdota y que tienen cotas mucho más altas. Desde el cambio de entrenador, los de Nervión se han clasificado para las semifinales de la Copa del Rey y han sumado cuatro de los seis puntos que ha disputado en la Liga BBVA, quedándose a ocho puntos de Europa.

El objetivo hispalense es jugar la próxima temporada alguna competición continental y el camino más rápido es disputar la final de la Copa, pero tampoco quieren descuidar la Liga. Así, desde el primer minuto saltaron al Pizjuán con ganas de sentenciar pronto el partido y llevarse los tres puntos. Las ocasiones eran continuas; Navas, Reyes y Negredo eran un quebradero de cabeza para los zagueros granadinos, que se veían incapaces de frenar los arreones locales.

Roberto veía venir que el primer tanto sevillista podía subir al marcador porque las llegadas eran continuas. El Sevilla perdonaba la vida al Granada en cada acercamiento al área nazarí, hasta que consiguió inaugurar el electrónico. Un córner al primer palo era rematado a la red por medio de Kondogbia, dejando sin aire a la defensa nazarí.

Los de Anquela intentaron reaccionar, sobre todo cuando vieron que Gil Manzano les perdonaba un penalti de Mainz a Kondogbia. Sin embargo, los hispalenses seguían controlando la posesión del balón y el segundo tanto estaba mucho más cerca que el empate. SENTENCIA SEVILLISTA.

En la segunda mitad, el Sevilla se relajó un poco y el Granada pudo llegar con algo más de peligro, pero no consiguió poner en excesivo peligro a Julián. La grada sevillista se empezaba a dar cuenta de que Palop no defendía el arco, pero tampoco le echaron en falta porque los delanteros estaban acertados.

El segundo gol no tardó en llegar, por medio de Negredo. De nuevo de cabeza, el Sevilla ponía el 2-0 tras un centro desde la banda izquierda de Rakitic medido a la testa del madrileño, para que picara el balón a la derecha de Roberto. Quedaban aún 20 minutos de partido