Morata, un goleador en la sombra

El delantero español Álvaro Morata jugará en la Juventus de Turín las próximas cinco temporadas tras abandonar la disciplina del Real Madrid, en cuya cantera ha despuntado durante los últimos años.

Se trata de un viaje de ida cuya vuelta está en el aire, pues los blancos se han reservado una opción de recompra de cara al futuro esperanzados con que el punta alcance en la Serie A el máximo de su potencial.

Morata emprende así su primera experiencia de clubes en el extranjero en busca de abrir las puertas que se le han cerrado en el Santiago Bernabéu. La confianza de la que siempre ha dispuesto el francés Karim Benzema apenas le dejó minutos para brillar el pasado curso, ese que estaba llamado a ser el de su confirmación tras la salida de Higuaín hacia el Nápoles.

El atacante disputó un total de veintitrés partidos en Liga, de los que fue titular en tres, anotando ocho goles. A esos duelos hay que añadir cinco de Champions League, donde vio puerta ante el Schalke 04, y seis de la Copa del Rey.

Las cifras han resultado insatisfactorias para el 'veintiuno' blanco, que ya la campaña anterior vivió una situación complicada alternando citaciones con el primer equipo a las órdenes de Mourinho y partidos con el Castilla, que por entonces dirigía Alberto Toril en la Liga Adelante.

Pese a todo Morata siempre ha contado con el cariño de la grada, deseosa de ver triunfar a un delantero alumbrado en el fútbol de colegio, labrado en el Atlético de Madrid y en el Getafe y pulido definitivamente en Valdebebas.

Él ha respondido no solo con goles sino con esfuerzo sobre el campo cuando ha tenido la oportunidad y también reafirmándose, hasta su salida, en la intención de aguantar en la entidad para triunfar en ella.

Ese objetivo tendrá que esperar como también tendrá que hacerlo el debut con la selección nacional. Precisamente la falta de protagonismo en su club no le ha ayudado a enfundarse 'La Roja' pese a los buenos números que ha ido consiguiendo con las distintas inferiores.

Sin ir más lejos se alzó con la 'Bota de oro' en el Europeo sub-19 de Rumanía y en el sub-21 de Israel, torneos ambos que acabaría conquistando el combinado español. El olfato goleador que está demostrando en esta última categoría, la previa a la absoluta, le hace situarse entre los futuribles candidatos a las listas de Vicente del Bosque.

Ahora deberá adaptarse a un campeonato desconocido para él donde los delanteros de su estilo, corpulentos pero no exentos de movilidad, suelen dejar buenas sensaciones. Es el caso de otro español, Fernando Llorente.

El ex del Athletic de Bilbao, con quien podría tener que competir por un puesto en el once, fue de menos a más en el curso de su estreno en Italia y acabó cambiando las críticas por alabanzas hasta el punto de ser considerado uno de los aspirantes a ocupar una plaza de ataque en el Mundial de Brasil.

Esa visibilidad es la que intentará adquirir Morata, que firma por una entidad que ha sufrido recientemente cambios con la dimisión del técnico Antonio Conte y la llegada al banquillo de Massimiliano Allegri.