Simeone no hace cuentas

Simeone no quiere pararse a mirar los números del Atlético. «No es bueno para nosotros», dice el preparador argentino. Pero la situación del Atlético es mucho mejor de lo que cualquiera podía imaginar al comienzo de la temporada. Once puntos separan al Atlético del Barcelona. Once puntos separan lo extraordinario de un equipo extraterrestre. Porque extraordinario es que el Atlético haya completado la primera vuelta con sólo tres derrotas y dos empates. El resto, 14 victorias. Son los mejores números del siglo para el Atlético, que no estaba tan bien clasificado al final de la primera vuelta desde la temporada del doblete, la 95/96.

«Siempre esperamos lo mejor. Y, evidentemente, el semestre pasado había sido muy bueno y tuvimos la posibilidad de hacer un trabajo importante en la pretemporada. No se fue casi ninguno de los jugadores del torneo pasado, salvo Diego, y llegó gente para darnos más posibilidades de potenciar al grupo y al equipo», expresó Simeone después de cerrar una primera parte del campeonato perfecta. La victoria ante el Zaragoza era la décima en diez partidos en casa. El Atlético es el único equipo que ha conseguido ganar todo lo que ha jugado en su campo hasta el momento. Ni siquiera el Barcelona ha podido conseguirlo. El empate ante el Real Madrid en el Camp Nou es la única «mancha» del Barcelona en la clasificación.

«El equipo sigue mostrando una identidad clara, puede jugar mejor o peor, pero tiene una identidad definida con la que hemos terminado una primera vuelta importante».

Simeone está contento, pero mantiene su idea de caminar «partido a partido». Se niega a hablar de objetivos y prefiere centrarse en el encuentro de ayer. «El primer tiempo fue casi perfecto: con todo el equipo obsesionado por ganar el partido», afirmó tras derrotar al Zaragoza. Lo que no se atreve a decir él, lo dicen los demás. «El Atlético está haciendo una campaña admirable. Tiene muy claras las cosas y actúa siempre como un equipo», asegura el técnico rival, Manolo Jiménez.