PGA Tour

Paul Casey se impuso al veneno de la serpiente

Nadie pudo finalmente con Paul Casey. El británico incluso se dejó ir por momentos y terminó con 72 golpes, su vuelta más alta del torneo, pero en ningún momento sufrió ni vio peligrar su título

Victoria Paul Casey Valspar Championship
Victoria Paul Casey Valspar Championshiplarazon

Ni la serpiente de este Copperhead Course del Innisbrook Resort, ni un desaparecido Dustin Johnson, ni los ataques de Louis Oosthuizen, Jason Kokrak y Bubba Watson fueron suficientes para hacer temblar el trono de Paul Casey. El británico se manejó con autoridad, solvencia y mucha, mucha tranquilidad en la cuarta y última ronda del Valspar Championship entregando 72 golpes (cuatro birdies y cinco bogeys).

El triunfo le sirve para retener el título logrado el año pasado, con lo que entra en la historia, ya que nadie hasta ahora había conseguido hacerlo dos veces seguidas. Otro hito más para él. Es verdad que llegaba a compartir el liderato con los citados Oosthuizen y Kokrak, pero no le temblaban las piernas, sabedor de su superioridad en el campo. Se mantuvo tranquilo, jugando perfecto de tee a green, donde terminaba de sentenciar cerrando todas las puertas y dejando al resto a un golpe, a un solo paso.

Dustin Johnson se bajaba pronto del carro de opositores toda vez que el acierto que encontraba el sábado desaparecía el domingo y de 67 golpes pasaba a 74 con tres bogeys y sin ningún registro en azul en su tarjeta, mientras que Jon Rahm, por contra, en su habitual sube y baja en esta cita, volvía a brillar, recuperando posiciones con 68 golpes.

El vasco firmaba un inicio espléndido con dos birdies en los dos primeros para un total de cinco y dos bogeys y pegarse una subida de 15 puestos, hasta el T6 (-5) y volver a terminar dentro de los diez mejores y empatados.

Buen final para él y también para Rafa Cabrera Bello, que no ha podido ser más regular ni aunque se lo hubiese propuesto. Cuarta ronda y tras tres 71 seguidos...otro más, para terminar con el PAR del campo y una subida de ocho posiciones hasta colarse en el T30. Sólido y sin sufrir en exceso, algo que en este campo es muy habitual, ha sabido sortear las trampas y no ceder demasiado en un recorrido que con el paso de las jornadas y debido sobre todo al viento se ha ido poniendo muy complicado.

Por contra, Sergio García terminaba peor aún, con 873 impactos, cayendo otra posición y ya muy lejos, acumulando un +4 en su global y en el puesto 54. Desde luego, no ha sido su torneo.