Thomas vuelve a demostrar su clase de campeón

Es verdad que Justin Thomas necesitó el desempate para vencer a Luke List en el Honda Classic, pero también es verdad que desde el inicio del día apretó para ponerle las cosas difíciles a List, quien no ofreció el mismo rendimiento que en días anteriores.

Los dos norteamericanos, que salían en el duelo estelar de la jornada, se fueron midiendo hoyo a hoyo, sin apretar en exceso pero tampoco dejando que el rival se fuera. Mientras que Thomas entregaba 68 (tres birdies y un bogey), List hacía lo propio con 69 (tres birdies y dos bogeys).

Octava victoria en el PGA Tour para Thomas, segunda esta temporada, lo que le confirma de nuevo como uno de los principales jugadores del circuito, aupándose al top 3 del ranking, superando a Jordan Spieth y encabezando, por el momento, la FedExCup. Él y Rahm son, ahora mismo, la juventud que está tomando el poder.

El campo no invitaba a florituras y por ello, los dos, intentaron ser lo más directos posible, caminando muy rápido de tee a green para meterse en cuantos menos problemas, mejor.

Se intentó sumar AlAlex Noren n un buen 67 y en ocasiones lo consiguió, nunca marchándose del retrovisor por lo que pudiera caer en el saco, aunque al final los que se jugaron el desempate fueron los dos norteamericanos, consiguiendo Thomas el birdie y List el par en el par 5 del 18.

Cerca quedó también Tommy Fleetwood con 69 golpes (P4), ByByeong Hun An n 65, la mejor vuelta del día, empatado en el quinto lugar y dentro del top 12, Tiger Woods. El norteamericano volvió a jugar muy bien al golf pero esta vez la ‘Trampa del Oso’ que había estado de su lado el día anterior, no le mostró su cara amable y le hizo terminar con 70, un resultado que, a pesar de todo, es muy bueno para él y le ha hecho concluir con el PAR.

El español Rafa Cabrera Bello terminó satisfecho al final, ya que se fue a los 69 (cuatro birdies y tres bogeys) y concluyó con sus mejores números de estos cuatro días. Subió con ello 17 posiciones y pudo estar entre los 30 mejores. Sergio García también mejoró ligeramente. Su última ronda fue de 71, no para tirar cohetes, pero sí para notar cierto alivio en su juego. Es cierto que no ha estado nunca cómodo en el PGA National, pero al menos ha sabido sufrir y salir airoso de más de una situación comprometida.

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