«Hay que cambiar el modelo»

«La rodilla de "Jota"es como la de una persona más joven, cuestión de genética y de que se ha cuidado», opina Chema, el fisioterapeuta que está tratando la articulación de José Javier Hombrados, capitán de la Selección de balonmano, el gran ausente en el Mundial que se disputará en España desde el 11 de enero. El primer gran reto deportivo de 2013. Y eso que la rodilla izquierda de Hombrados ahora, más de dos meses después de la operación, tiene forma de rodilla, pese a que está atravesada por un clavo, que se reabsorberá, y a que tiene una grapa al otro lado de la plastia, la parte de su tendón que utilizaron para sustituir el ligamento cruzado que se rompió.

Aparte del ligamento cruzado tiene puntos en el menisco y una fractura de Segond. «Va con el trabajo adelantado», asegura Chema, la conciencia del portero, que no le permite relajarse ni olvidarse de esa rodilla que trata seis días a la semana, además del trabajo en la piscina y con las máquinas, para recuperar el movimiento y los siete kilos de masa muscular que perdió.

Todo sucedió el 14 de octubre. Hombrados salió a parar un balón, un gesto que ha podido repetir un millón de veces, y al caer... ¡crack! «Pensé que se acababa todo, pero también que estaba satisfecho de lo que he hecho. Una especie de resignación y paz», confiesa «Jota», que esa noche no durmió y, tras darle vueltas, llegó a una conclusión: «Hay que ser un poco rebelde. ¿Por una tontería así me voy a quejar sabiendo cómo están muchas otras personas?». Tiene 40 años, pero el Atlético le renovó y él comenzó a recuperar la rodilla. Por su cabeza sólo pasaba que se tenía que retirar en el campo, aunque una nueva vía se ha abierto en su vida. Tras el Mundial de España hay elecciones en la Federación y varias personas han pensado en él como candidato a presidente. «Me llena de orgullo que piensen que puedo ayudar. Lo estoy pensando. Es difícil: ¿sigo jugando o no? ¿Puedo ayudar al balonmano? Todo eso me pasa por la cabeza y los plazos son breves», explica.

No son buenos tiempos para el deporte en general y para el balonmano en particular. Ha habido recortes y la gestión de la Federación será complicada. También lo está pasando mal la Liga Asobal, de la que han desaparecido equipos históricos por la crisis. «Hay que cambiar el modelo, que está sustentado en instituciones, y las instituciones han tenido reajustes porque la situación económica ha cambiado. Además, muchos patrocinadores se han ido porque ha habido quiebra de empresas. Entonces tenemos a clubes con presupuestos bajos y una amortización de deuda en medio de los contratos altos que tenían cuando había más ayudas. Eso ha hecho que el nivel de la Liga sea diferente», analiza Hombrados.

Muchos jugadores se han ido a campeonatos extranjeros porque allí les pagan mejor... Pese a todo, a España se le pide medalla. «Los españoles somos muy de meter presión, pero hay que dejarles que vayan poco a poco. Hay que coger carrerilla en el grupo, estar lanzados en la fase de Zaragoza, y en Barcelona, dar el golpe. También hay que ser ambicioso porque todo el mundo sabe que España siempre está ahí. El empujón de jugar en casa nos puede ayudar. Todos soñamos con que una medalla nos ayude a salir, o a mejorar la situación en la que está el balonmano». Los rivales serán los de siempre: Francia, Dinamarca, Hungría, Croacia... Y Valero Rivera cuenta con el bloque de los Juegos. «Tenemos muy buen juego, grandes jugadores entre líneas, pivotes, extremos, una gran portería, defendemos bien... Quizá lo único que nos falta es ese jugador que meta goles desde 10-12 metros», dice Hombrados, que lo tendrá que ver desde la grada, como Raúl Entrerríos, la última baja de la Selección.

El año 2012 ha estado lleno de decepciones deportivas y ha sufrido la primera lesión grave de su carrera. «Estoy deseando que el año acabe», reconoce. Quizá 2013 empiece con una presidencia para él. Mientras deshoja la margarita, Chema continúa «trabajando» su rodilla, por si hay portero para rato...

Raúl Entrerríos es baja de última hora

Una rotura en la mano derecha impedirá al central de la Selección –y jugador indiscutible en todos los campeonatos– disputar el próximo Mundial, que dará comienzo en apenas once días. Durante el entrenamiento de ayer, Raúl Entrerríos sufrió una fractura que le obligará a pasar por el quirófano en los próximos días. Carlos Ruesga, jugador del Ademar de León, ha sido el designado por Valero Rivera para cubrir la baja del jugador del Barcelona Intersport.