Vuelta a España

Ciclismo

Homenaje a Indurain, Perico y Pereiro

Javier Guillén, director de la Vuelta, junto a Indurain, Perico Delgado y Pereiro
Javier Guillén, director de la Vuelta, junto a Indurain, Perico Delgado y Pereirolarazon

La Ruta de los Gigantes es un monumento que reconoce a todos los ganadores de la historia del Tour. Durante la carrera francesa se inauguró en un parque céntrico de Pau este reconocimiento, una serie de totem dispuestos en espiral en el que cada "piedra"recuerda un año del Tour y sus ganadores. En julio fueron Bernard Hinault, Bernard Thevenet, Greg Lemond y Stephen Roche los que descubrieron su piedra.

Aprovechando el paso de la Vuelta por Pau, los homenajeados fueron tres ganadores españoles: Miguel Indurain, Pedro Delgado y Óscar Pereiro. Los tres descubrieron los tótems con sus triunfos, aunque enel caso de Miguel lo hizo sólo con el primero.

Al acto acudió también el director general de la Vuelta, Javier Guillén, que reconoce a Pedro Delgado como el culpable de que él se enganchar al ciclismo. "Antes habían ganado el Tour Bahamontes y Ocaña, pero él es el corredor moderno que nos enganchó al Tour. Es el mayor ejemplo de por qué nos gusta este deporte", explica Guillén.

Pereiro es el más joven de todos. Lo ganó en 2006, pero Guillén recuerda el vaticinio que le había hecho Víctor Cordero, su antecesor en el cargo, tiempo antes. "Hay un tal Pereiro que tiene tanta clase que un día puede ganar el Tour", le dijo. Pero esa predicción sólo se hizo real por el empeño de Pereiro en hacerla realidad. "Sólo tú pensabas que podías ganar ese Tour", le dijo el director general de la Vuelta.

Indurain es el que más atención capta de todos. "Es el deportista más importante de nuestra historia junto a Rafa Nadal", asegura Guillén, que recuerda su carácter único: "hay más corredores que han ganado cinco Tours, pero sólo él lo ha hecho de manera consecutiva", añade.

Miguel recuerda que la primera vez que llegó a Pau fue en una etapa en la que llegaron juntos Bernard Hinault y Pedro Delgado. De Pau salió también la etapa en la que se vistió de amarillo por primera vez. Indurain reconoce que le hubiera gustado que en su época hubiera en Pau una contrarreloj como la de hoy.