¿La última temporada de Ronaldo?

El Real Madrid conoce que, ahora, quiere marcharse en junio, pero confía en que, con el tiempo, este enfado sea temporal

El domingo Cristiano Ronaldo vio nacer a su cuarto hijo, el lunes se ejercitó en el gimnasio de Valdebebas y ayer, después de saberse que otra vez tiene en la cabeza marcharse del Real Madrid, se entrenó ya en el césped con el resto de sus compañeros. Son tiempos en los que no paran de sucederle cosas a un futbolista, que, como sucedió este verano, no termina de encontrarse a gusto en España y vislumbra un futuro no muy lejano, la próxima temporada, lejos del Santiago Bernabéu.

Después de dar el pase del tercer gol a Isco, en el último partido en casa, el portugués se puso serio, casi enfadado, como si no tuviera muchas ganas de celebrar nada, pese a la victoria del Madrid. Se había pasado todo el partido ofreciendo desmarques, buscando el gol, pero no tuvo suerte. Deportivamente no le salen las cosas estos días y fuera del campo mezcla la felicidad de los hijos con la preocupación de sus problemas con Hacienda.

Ése es su principal problema y él está dispuesto a discutirle que haya cometido algún delito o que haya buscado burlar la ley para beneficio propio. Por eso ha contratado a un despacho especializado y por eso no quiso llegar a un acuerdo. Pero eso no significa que todo lo que pasa le haga sentir especialmente cómodo. Lo que sucede ahora es una situación muy parecida a la de este verano, cuando periodistas afines al entorno del jugador dejaron caer que quería cambiar de aires por no sentirse respaldado por el club. Luego todo quedó en el olvido, con Cristiano pudiendo asegurar que de su boca no salió nada. La única diferencia es que ahora sí que parece más decidido a dejar el Madrid, como si esta vez fuera algo más que un calentón.

Eso parece ahora, claro. Cristiano Ronaldo ya ha vivido varios episodios parecidos en el Real Madrid y también cuando estaba en el Manchester, cuando era joven y empezaba a ser la estrella que es ahora. «No sé», contestaba ayer Tebas, el presidente de la Liga, cuando le preguntaron por el asunto Ronaldo: «Es que es la decimonovena vez que dice que se va, así que no voy a opinar. Tiene años de contrato y no creo que se vaya a terminar su ciclo. Firma para cumplir los contratos». Por eso, en el club blanco confían en que el paso del tiempo, otra vez, rebaje la obsesión de Ronaldo. Si vuelve a marcar goles, si el Madrid se lanza otra vez hacia los títulos, como ocurrió al final de la temporada pasada, el cambio de escenario seguramente hará cambiar el sentido de la obra. También lo espera Tebas: «Messi y Cristiano Ronaldo son los que nos han hecho crecer y los que han hecho que seamos lo que somos hoy porque llevan muchos años con nosotros, sería un golpe su salida».

Fue en noviembre del año pasado cuando el Madrid y el futbolista anunciaron la renovación del contrato de ambos hasta 2021, es decir, hasta que el delantero tenga 36 años. El día que se presentó, Ronaldo aseguró que le iba a dar tiempo a firmar otro contrato y que pensaba quedarse en el Madrid hasta pasados los cuarenta años. Después de la derrota frente al Tottenham de esta campaña el portugués salió a hablar con la Prensa y, además del partido, le preguntaron acerca de su futuro. Fue tajante: no pensaba en la renovación y estaba muy a gusto con su actual situación.

Es verdad que desde el año pasado han pasado miles de cosas en el fútbol: Hacienda quiere que el futbolista pague y, sobre todo, la inflación ha disparado los precios y los salarios. Es decir, Cristiano podría pensar que su salario, ahora mismo, no está de acuerdo con su posición en el fútbol mundial. Pero en el club no quieren dar vueltas a eso. El sábado el conjunto de Zidane juega un partido importante (como todos ya en esta Liga) en el campo del Atlético de Madrid y no quieren que nada desvíe la atención de la plantilla.