FIFA

Los mundos de Blatter

Blatter no escatimos sonrisas y «selfies» en un acto de la FIFA
Blatter no escatimos sonrisas y «selfies» en un acto de la FIFAlarazon

Dice en un acto de la FIFA que no dimitió, sino que puso su cargo a «disposición del Congreso»

Mientras la investigaciones sobre la presunta epidemia de corrupción en la FIFA siguen su curso, varios altos dirigentes están encarcelados y aparecen nuevos datos sobre sobornos y mordidas que asombran a la opinión pública, Blatter sigue a lo suyo, en su mundo. Nada más estallar la trama corrupción apareció desafiante antes y después de la votación de la que resultó reelegido para un nuevo mandato de cuatro años. «No soy perfecto, lo siento» o «disfruten de la vida», fueron alguno de sus mensajes, poco acordes con la situación que atravesaba la organización que llevaba más de veinte años presidiendo. Cuatro días después de aquel discurso apareció mucho más serio para decir que dejaba su cargo, aunque el jueves por la noche en un acto de la FIFA soltó una frase que hizo temblar a más de uno: «No dimití, sólo dije que ponía mi cargo a disposición del Congreso», admitió haciendo algo que le gusta a hacer y es jugar con el significado de las palabras. Para sus opositores, la frase puede tener un significado y les plantea dudas sobre la estrategia que tomará en los próximos meses y en el congreso extraordinario que, entre diciembre y marzo próximos, debe elegir el nombre de su sucesor.

Hay quienes no se fían de Blatter y sostienen que podría decidir volver a presentarse si siente que no hay ningún candidato con el calibre suficiente para ocupar su sillón. La propia FIFA se vio obligada a emitir un comunicado confirmando que la frase era tal cual se había reflejado, pero que sin embargo estaba completamente en línea con su discurso de adiós el día 2 de junio.

Blatter no había vuelto a aparecer desde aquel mensaje lacónico en el que se suponía que daba un paso al costado, pero lo hizo el jueves muy a su manera. Se trataba de un acto de agradecimiento a los empleados que trabajan en la construcción del nuevo museo de la FIFA, con los que departió sonriente, como si nada hubiera pasado y está pasando dentro de la institución. Posó junto a algunos para que se llevaran un «selfie» de recuerdo y se dejó fotografiar sonriente y tranquilo.

Lo que no hizo fue aclarar la razón por la que en sólo cuatro días pasó de estar convencido de cumplir el mandato de cuatro años que acababa de renovar a anunciar su adiós en una conferencia de prensa organizada y anunciada a toda prisa. Blatter sigue aparentemente tranquilo a pesar del avance de las investigaciones de las Justicias suiza y estadounidense y de que el FBI esté investigando de forma directa sus actuaciones en la FIFA.

Sigue en los mundos de Blatter y dejando dudas sobre si se fue realmente o no.