Amigos y compañeros recuerdan al expiloto

Todo gracias a él

Carmelo Ezpeleta

CEO Dorna, organizador mundial de MotoGP

Todo el mundo del motociclismo y yo personalmente estamos profundamente apenados por el fallecimiento de Ángel Nieto. Y digo especialmente yo porque para mí era un magnífico amigo y una persona muy cariñosa. Nos ayudábamos en todo lo que podíamos y siempre estábamos bromeando sobre lo bien que estábamos. Teníamos la esperanza de que todo iba a mejorar. Cuando tuvo el accidente y pasaron las primeras 72 horas, pensé que iba a salir de ésta. Por eso, las noticias del empeoramiento de su salud que recibimos por la mañana y la posterior noticia de su muerte nos han sumido en una profunda tristeza por su pérdida.

Tengo que decir que lo que es ahora el campeonato del mundo de motociclismo, como nuestro papel de organizadores de MotoGP y el actual sistema de organización de las carreras no habría sido posible sin el apoyo y la inspiración de Ángel Nieto, que siempre estuvo a nuestro lado y colaboró con nosotros estrechamente. El motociclismo mundial y muy especialmente el español tienen con Ángel una deuda impagable. Si Ángel no hubiera sido lo que fue, el Mundial no estaría donde está con seguridad. Encontraremos la manera de homenajearle como se merece este fin de semana.

Fue un adelantado a su tiempo

Carlos Sainz

Bicampéon del mundo de Rallys

Ángel fue un deportista que se adelantó a su tiempo. Uno de esos genios que nacen una sola vez y que ha marcado el desarrollo del motociclismo español. Él abrió un camino por el cual luego transitaron otros pilotos y gran parte de los éxitos que ha conseguido España en las competiciones de motos se deben a la genialidad de Ángel. Una persona que, además, gozaba de un gran carisma y el reconocimiento y el respeto de todos.

Un amigo más que un rival

Giacomo Agostini

El ganador de más Mundiales (15) de la historia

Ángel Nieto era un amigo más que un rival. A veces decía que me quería imitar, pero él era inmenso. Se nos ha ido una gran persona a la que hay que recordar como un gran campeón. Ha sido una fatalidad la que se lo ha llevado, porque estaba acostumbrado a correr a 250 kilómetros por hora. Estábamos esperanzados y esperábamos que ganara la carrera más importante de su vida, pero por desgracia no ha podido ser. Te echaré de menos, amigo.

Llevó las carreras a la tele

Valentín Requena

Periodista, narrador Mundial Motociclismo TVE

Estuvimos juntos comentando carreras en televisión casi 17 años. No me acuerdo cuando conocí a Ángel exactamente. Antes de narrar en la tele yo estaba en la revista Motociclismo y debí conocerle a finales de los 60. Yo narré su último título en la tele en 1984 y luego estuvimos juntos en cabina desde 1987 hasta 2004. No tuve que convencerle mucho para que comentara las carreras y no fue sólo una cosa mía. Su empeño era que las motos tuvieran repercusión. Cuando él empezó a ser campeón del mundo no tuvo ninguna repercusión en medios ni en radio ni en televisión ni en prensa escrita. Él fue el gran culpable de que se dieran las carreras en la tele y de que la cantera floreciera. Ángel era especial porque era muy extrovertido, simpático, un genio como piloto y como persona, hecho a sí mismo, al contrario de muchos deportistas que han ganado dinero, aunque ese dinero ahora sería una risa. Supo invertirlo.

Dentro de la pista era el más listo, aunque no llevara la moto más rápida. Tuvo motos de todos los calibres y, sin duda, sabía aprovechar al máximo de cada moto. Además, tenía una psicología muy especial con los rivales, ésa que te da la universidad de la vida. Era un hombre al que le gustaba mucho el bricolaje y se hacía sus propios trabajos en su casa. Su mayor alegría en los últimos tiempos fue cuando su hijo Pablo logró la victoria en el Gran Premio de Portugal. Yo pocas veces le vi tan contento.

Me quedaré con un recuerdo muy amplio de Ángel porque era un hombre que era una fuerza de la naturaleza, un tío afable, simpático, listo, amigo de sus amigos, que no se enfadaba nunca. Hemos estado mucho tiempo juntos y la verdad es que ha sido una de las personas que más me han impactado en la vida.

Esas motos que parecían de niño

Manolo Santana

Primer español ganador en Wimbledon. Pionero del deporte nacional

Estoy destrozado. No puedo creer lo que ha sucedido. Una persona tan valiente e inteligente, que se jugaba la vida cada día en las motos, que se nos haya ido de esta forma tan absurda. No tiene explicación. Es el destino y hasta en su marcha nos ha dado un última lección, que es intentar estar el mayor tiempo posible con la gente que queremos. Era un tío extraordinario. Hubo una época en la que era complicado ser deportista en España. Estábamos cuatro: yo en tenis, Pedro Carrasco en boxeo, Seve Ballesteros en golf y, claro, Ángel Nieto en motociclismo. Fuimos nombrados los cuatro caballeros de la orden. Eran unos años en los que para poder salir a competir tenías que ir a la Puerta del Sol para conseguir el visado. Allí tenías que explicar dónde ibas y lo que ibas a hacer. Nada que ver con la actualidad. Él se movía mucho por Europa y yo iba más a Estados Unidos. Cuando nos veíamos lo pasábamos muy bien contándonos batallitas. Yo recordaba, por ejemplo, cómo tenía que ir en metro a las pistas de Wimbledon, la primera vez que gané. Él me hablaba de que quería tener un museo. «Cuando me retire voy a decirle a la gente que vaya a mí museo a ver mis motos, que parecen de niño, y el valor que suponía correr con ellas», me comentaba. Y vaya si tiene un museo. Uno fantástico. Era una persona extraordinaria, simpática, muy humilde, siempre dispuesto, que quería mucho a sus amigos y que trataba muy bien a todo el mundo. Trabajamos juntos durante nueve años en una empresa americana y teníamos mucha relación. Eso también nos unió, aparte de nuestra aventura en el deporte. Porque lo nuestro era una aventura.

Le quería muchísimo. No hay palabras, no puedo creerlo. Que descanse en paz. Se ha ido uno de los más grandes.