Márquez: «En una última curva, a mi hermano no lo trataría igual que a los otros»

Pocos pueden presumir en el Mundial de una alineación mejor que la de Estrella Galicia. Los tres campeones vigentes son imagen de la cervecera, especializada en impulsar a los mayores talentos del mundo del motor. Su relación con la velocidad comenzó con Marc Márquez, cuando sólo era un chico que prometía mucho, algo parecido a lo que ahora le sucede a Joan Mir, que se siente halagado cuando le compararán con el de Cervera. El trío de campeones lo completa Franco Morbidelli, dominador de Moto2 este curso y que el próximo va a competir por primera vez con su maestro, Valentino Rossi.

Los tres están terminando los últimos compromisos antes de tomarse unas esperadas vacaciones. Todos han probado sus motos del próximo curso y tienen buenas sensaciones. Marc no quiere asegurar que en 2018 la Honda va a ir bien desde el principio. De momento sólo ha probado el nuevo motor y parece que le convence, aunque queda mucho por delante. En el acto en Madrid de Estrella Galicia, reconoció que su sueño más “caprichoso” es poder “competir con o contra” su hermano en la máxima categoría. Ante lo que sucedería si se encontraran en una última curva luchando por la victoria, Marc lo tiene claro: “Sería superbonito, no le trataría igual que a los otros porque todo quedaría en familia, pero mejor que la victoria quede para el mayor. Si pasa será genial, pero primero se lo tiene que ganar y trabajar mucho. Ojalá lo podamos disfrutar”.

De momento, con quien competirá en pequeño de los Márquez será con Joan Mir, uno de los llamados a ocupar a pelearle el trono a Marc en el futuro. Los dos compartirán equipo, el Marc VDS, y además del título de Moto2 también estará en juego un hueco en MotoGP más tarde o más temprano. El reciente campeón de Moto3 no quiere meterse prisa y si tiene que elegir entre el campeonato o un ascenso para 2019, elige lo primero, “porque si eres campeón subes seguro a MotoGP”.