Thiem deja a Madrid sin Federer

Dominic Thiem puso fin a la trayectoria de Roger Federer en Madrid en un auténtico partidazo de tenis (3-6, 7-6 [13/11] y 6-4). El austriaco es el mismo rival que superó al helvético la última vez que había jugado en tierra antes de venir a la capital de España, en mayo de 2016. Era el favorito Thiem por este motivo y porque en tierra se desenvuelve como pocos y todos lo señalan como el principal aspirante al trono de Nadal. Pero no se lo puso en absoluto fácil Federer, que ha mostrado una rápida adaptación a esta superficie, por mucho que la altitud de Madrid favorezca a su tenis ofensivo. El suizo ha hecho las delicias del público en los tres partidos que ha disputado, es uno de los favoritos y se ha ganado el apelativo de "Mister oh", porque con nadie como con él sueltan los aficionados esta interjección. El "oh"de Federer es la sutileza, por la dejada en la que acaricia la pelota o la volea o el revés paralelo que esconde hasta el final. Lo de Thiem es más un "guau"por la energía que pone en cada partido, en cada golpe, en cada punto, como saques a más de 220 kilómetros. Retumbaba el sonido de la raqueta contra la pelota cuando la impactaba a esta velocidad. Pero es que además la hace girar mucho y botar alto, por eso es tan bueno en tierra batida, aunque en los cuartos de final se vio sorprendido por Federer al comienzo. El suizo también saca de lujo, pero de otra manera, más "oh": 180 km/h, 190, 186... Menos rápido que su rival, pero colocado y difícil de detectar, de ahí que en el primer set no diera opciones al austriaco. Lo ganó gracias a un break tempranero en un juego muy disputado.

Las emociones no habían hecho más que empezar. Ya se habían visto buenos puntos y Thiem aumentó sus prestaciones un poco para vivir un set sin inmutarse en el servicio y desaprovechando las oportunidades al resto: tuvo un 15-40 con 1-1 y tuvo un 0-40 con 3-3, pero el partido llegó hasta el tie break. En medio, una docena o más de "oh", "guau"o "uy", esto último por las pelotas que se escapaban por poco. Las verdaderas hostilidades empezaron en un desempate emocionantísimo: 3-0 Federer rápido. 3-3 Thiem. Primera bola de set para el austriaco (5-6) salvada por Federer con una dejada y un revés sin dejarla botar... y "oooh". Segunda de set para Thiem. Una de partido para Federer (con 8-7) que no aprovechó al mandar el resto fuera. Otra más en la que salvada con un gran servicio. Una eternidad de tie break resuelto con 11-13, pero definido un poco antes en un saque-red de Federer que Thiem contestó con un passing espectacular que llevó a las gradas una mezcla de "oh", "ah", "eh"...

Tomaba la ventaja moral Thiem. Todavía más cuando logró una ruptura rápida y se puso 1-2. Se dirigía hacia el triunfo con fuerza y decisión pese a la resistencia del suizo, que jamás se rindió y que incluso llegó a colocarse 4-4, a igualar el choque, para sufrir un break después tras un punto de dimensiones parecidas a las del del tie break. Remó Federer, pero venció Thiem con justicia y ahora se dirige al próximo desafío: las semifinales contra Djokovic.