Un invierno decisivo

Los tres primeros tienen un maratón de partidos hasta que empiece la «Champions»Los tres primeros tienen un maratón de partidos hasta que empiece la «Champions».

El Real Madrid acabó el año disputando la final del Mundial de Clubes y empieza 2015 jugando en campo del Valencia, el cuarto clasificado, y después contra el Atlético, el último equipo que le derrotó. Por eso Ancelotti pidió a sus futbolistas que durante el descanso de Navidad se olvidasen de la pelota, que bastante habían hecho durante el final de 2014. Las redes sociales de los jugadores del Madrid, durante estos días, se han llenado de fotos de sus vacaciones, con sus familia, totalmente relajados, obedeciendo las órdenes de su entrenador. Pero ya se ha acabado el tiempo de paz y está por ver cuándo van a poder volver a vivir una semana igual. Desde ahora y casi hasta finales de febrero, el líder de la Liga, al igual que el segundo y el tercer clasificado, viven un maratón de partidos, en el que además de medirse entre ellos, servirá para clarificar casi definitivamente el panorama de la clasificación y el estado de forma y capacidad de competir de los tres.

Porque el Real Madrid empieza a todo ritmo, pero sabe que en la segunda jornada de enero puede eliminar o al menos dejar muy atrás a uno de sus perseguidores. El domingo 11, el Atlético de Madrid visita el campo del Barcelona. Un día antes, los de Ancelotti se habrán enfrentado al Espanyol, en el Bernabéu. El duelo entre segundo y tercero hace que el líder mire con optimismo la suma de partidos a los que hace frente.

Aunque la posibilidad de descanso va a depender de cómo se desarrolle la Copa del Rey. Los dos equipos madrileños se miden entre ellos y lo más probable es que quien gane la eliminatoria se encuentre en la siguiente ronda, los cuartos de final, con el Barcelona. Sólo uno de los tres llegará a las semifinales de mediados de febrero. Los grandes de la Liga tienen que medir si les merece la pena pelear por un puesto en la final de la Copa que se disputará a finales de mayo o si es mejor, para administrar minutos, caer derrotado antes, olvidarse de la dureza de los cruces y centrarse en otros objetivos.

El equipo de Ancelotti suma más partidos que nadie y en estos dos meses disputa, seguro, un encuentro más que sus perseguidores: el aplazado contra el Sevilla de la última jornada de 2014. Pero es, de los tres primeros, el que mejor llega. Lleva 22 victorias consecutivas y va recuperando efectivos. A mediados de febrero ya podrá contar con Modric. Si no le puede el cansancio, sabe que en este par de meses puede definir, para bien, su futuro.

El Barcelona de Luis Enrique, en cambio, continúa en la indefinición y cada vez le queda menos tiempo para saber a qué quiere jugar. Mañana le espera Anoeta, donde han perdido Real Madrid y el Atlético. «Respetamos al Barcelona porque son muy buenos, pero vienen a San Sebastián y hay que demostrarles que no es un lugar donde sea fácil venir y ganar. Tenemos que hacerlo tan bien como lo hizo el equipo contra Real Madrid y Atlético», aseguró ayer David Moyes, el entrenador de la Real Sociedad.

Pero quien se lo juega todo nada más empezar el año es el Atlético de Madrid. Hoy recibe al Levante, y después, los tres partidos siguientes son contra el Real Madrid, en Copa y el Barcelona en la Liga. La tormenta perfecta, que va a medir el verdadero nivel rojiblanco y decidirá a qué puede aspirar esta temporada.

Real Madrid: Hacia un pichichi histórico

Durante sus vacaciones, Ronaldo ha colgado en internet varias fotos. Siempre estaba en bañador, descansando en el lujoso hotel Atlantis The Palm, en la isla artificial de La Palmera, construida a pocos kilómetros de Dubái. Tras un intenso 2014, el portugués sabía que necesitaba estar alejado de la presión del fútbol para que su cuerpo recupere la energía. El portugués cerró la primera parte de la Liga con un ritmo de goles asombroso: 25 en 15 jornadas (aunque él sólo disputó 14 partidos). A ese ritmo, puede superar el récord de 50 tantos en una Liga de Messi. Llegan los días más decisivos para el Real Madrid y Cristiano será fundamental para que los de Carlo Ancelotti continúen con su ritmo triunfal. El entrenador italiano lleva días avisando con que, antes o después, se tendrá que perder, pero su objetivo, como el del resto de la plantilla, es alargar lo máximo posible una racha de triunfos que apunta al libro Guinness de los récords. Es un equipo que parece imparable con un goleador como no se había visto en la historia de la Liga hasta ahora. El Madrid acabó 2014 con un ritmo algo menor que cuando comenzó a ganar y Valencia, donde el Barcelona venció en el último segundo, es un buen lugar para medir cómo vuelven los blancos. El cuarto clasificado podrá contar con Enzo Pérez, su nuevo fichaje de invierno.

Ronaldo sabe que toca dejar lo mejor de sí mismo en unas fechas en las que puede ganar el Balón de Oro al mejor futbolista de 2014. Se concede el lunes 12. Mañana, contra el Valencia, comienza la carrera para el Balón de Oro de 2015, por J. Aguado.

Barça: El partido que más le cuesta a Messi

Llegó Messi cerca de las cuatro de la tarde a Barcelona, algo después que Neymar y Alves, y los tres participaron en el entrenamiento de por la tarde, el primero del equipo en 2015, el penúltimo antes del duelo contra la Real Sociedad. Ellos tres pudieron alargar sus vacaciones de Navidad unos días, ya que el resto regresó el 30 de diciembre, lo que ha levantado cierta polémica. En realidad, los brasileños y el argentino sólo se han perdido la sesión preparatoria del 30, porque 31 y 1 descansó toda la plantilla. Bravo terció sobre el posible agravio. «No me ha molestado, estaba todo hablado», aseguró el portero, que mañana se enfrentará al equipo que le trajo a la Liga en 2006. Con poca o mucha preparación, Messi será titular en Anoeta porque el partido es determinante. El primer choque del año es uno de los que más le cuesta jugar al «10». Por diferentes razones, en sus diez temporadas en Primera, Leo sólo ha disputado tres veces ese encuentro. En su primer curso (2004/05), todavía alternaba su presencia entre el primer y el segundo equipo. La campaña siguiente fue una de las veces que sí estuvo en el estreno de año. Las otras dos fueron en la temporada 2011/12 y la 2012/13. Sus otras seis ausencias después de esa primera se resumen en tres por lesión, incluido el año pasado, y tres por rotaciones, porque estaba recién aterrizado, que han coincidido cuando la jornada era el día 2 o 3. En esos tres partidos que sí jugó, Messi sólo ha marcado un gol, de penalti. El Barça ganó dos duelos y empató uno. «No tenemos margen, no podemos cometer más tropiezos», analiza Bravo, por Francisco Martínez.

Atlético de Madrid: «Un sentido de pertenencia»

Pocos futbolistas podían crear tanta expectación en el Atlético, y esa sensación de regreso de uno de los suyos, como Fernando Torres. Hoy no juega, pero estará listo contra el Real Madrid, su rival de toda la vida. Los aficionados rojiblancos recuperan a un símbolo en una época de felicidad absoluta: «Estoy contento porque recuperamos el sentido de pertenencia», explicó ayer Simeone, que jugó con el delantero y ahora le entrena. «Es una llegada importante en un momento bonito para él porque se encuentra un conjunto trabajado, que lleva varios años trabajando junto», continuó ayer el técnico atlético. Es un refuerzo sentimental, pero el Cholo quiso dejar claro que también, o sobre todo, es un refuerzo para aumentar la competitividad del equipo. «Yo sólo pienso en la parte deportiva y en ningún momento pienso en otra faceta. El año pasado ya quisimos que volviera. Con su llegada todos salimos beneficiados». Torres aporta nuevas soluciones a un ataque que con Mandzukic no podía correr hacia la espalda del rival: «Seguimos mejorando porque las características de Fernando pueden ayudar al equipo», dice su entrenador. «Esperamos que nos eche una mano con toda su ilusión, talento y pasión. Tendrá que esforzarse para competir con Griezmann, Mandzukic y Raúl Jiménez».

Hay quien duda de un futbolista que no estaba en su mejor momento: «La gente puede opinar o hablar. Fernando no llega como un salvador», por J. A.