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Las comisiones te hacen perder dinero: no lo permitas

Dentro de las comisiones más habituales, la más conocida es la de mantenimiento

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La situación económica de cada persona será determinante para decantarse por un método u otroLa Razón¿Qué pasa si no puedo hacer frente a la hipoteca de mi casa, oficina o local comercial?

A nadie le gusta pagar comisiones. Eso es un hecho con el que muchas personas, pese a sus diferencias, pueden estar de acuerdo. En el pasado, la presencia de ciertas comisiones en nuestras cuentas bancarias era algo habitual, pero, hoy en día, como constatan fuentes del comparador financiero HelpMyCash.com, deshacerse de ellas resulta mucho más sencillo de lo que, a priori, uno podría pensar.

A lo largo del transcurso de este 2020, han sido varias las entidades que han provocado el descontento masivo de los particulares: los clientes de Bankia y Banco Sabadell se hicieron eco en las redes de su malestar general por el aumento y el cobro de comisiones, una tendencia a la que se ha unido Unicaja, cuyas nuevas condiciones y política de comisiones entraron en vigor el pasado 1 de septiembre, y próximamente lo hará CaixaBank, cuyas comisiones pueden alcanzar hasta los 240 euros anuales por el mantenimiento y los servicios asociados a las cuentas corrientes. Pero, ¿cuáles son las comisiones más típicas que se adueñan de nuestro dinero? ¿Existen bancos que no cobren estas comisiones?

Comisiones bancarias: una forma de perder dinero poco a poco

Las comisiones más sencillas de evitar son a la vez las que más nos repercuten, pues están vinculadas a la operativa diaria y, como tal, su cobro puede ascender hasta cifras muy elevadas si no se le pone fin al asunto.

Dentro de las comisiones más habituales, la más conocida es la de mantenimiento, pues se trata de una comisión de la que muchos particulares han sido víctimas en alguna ocasión. Esta comisión se cobra bajo el pretexto del esfuerzo que el banco dedica al mantenimiento de las cuentas de sus clientes, o lo que es lo mismo, la comisión que el banco cobra por tener la cuenta abierta. El cobro, que puede ser desde mensual hasta semestral, puede contemplar cifras elevadas de hasta 240 euros anuales.

Otra de las comisiones que se puede evitar es la que se cobra en concepto de administración. Este tipo de comisión, por fortuna, ya no es tan frecuente, pero hubo una época en la que su presencia en las cuentas bancarias podía llegar a suponer un auténtico problema, pues esta comisión consiste en la aplicación de un pequeño cobro por cada acción que quede registrada en la cuenta. Es decir, que el banco cobraba una comisión por cada ingreso y retirada de efectivo, por cada transferencia emitida o por cada pago con tarjeta realizado. Mediante la suma de los pequeños cobros, al final el importe podía llegar a ser elevado.

La comisión vinculada a las transferencias bancarias también es una comisión que conviene suprimir de inmediato. Enviar y recibir dinero es, con toda probabilidad, una de las acciones más comunes dentro de la rutina financiera personal. Si bien hoy en día existen alternativas rápidas, cómodas y gratuitas como Bizum o PayPal, las cuales nos permiten realizar transferencias nacionales y SEPA sin coste, estos dos intermediarios no siempre pueden amoldarse a todas las situaciones o existen límites de dinero o geográficos que no se pueden superar. Por ello, es importante que, a la hora de emitir transferencias, nos aseguremos de que nuestra cuenta está exenta de este tipo de comisiones.

Cuentas sin comisiones, la mejor forma de dejar de perder dinero

Las cuentas sin comisiones y con pocos o apenas requisitos existen, aunque quizá en nuestro banco de toda la vida no las encontremos. Pero están ahí fuera y hay que saber buscarlas.

BBVA y Abanca son dos de las entidades que ofrecen cuentas sin comisiones y sin ningún tipo de vinculación para no tener que pagar comisiones. En BBVA, se puede contratar la Cuenta Online sin Comisiones, una cuenta 100% online completamente gratuita y sin vinculación exclusiva para los nuevos clientes, cuya tarjeta de débito, además, otorga acceso a los 6.000 cajeros de BBVA sin coste alguno.

Abanca, por su parte, dispone de la Cuenta Clara Abanca, una cuenta bancaria sin comisiones siempre y cuando la contratación y gestión de la cuenta se lleve a cabo de forma online. La cuenta, que no tiene vinculación obligatoria, ofrece tarjetas gratuitas y otorga a los menores de 35 años la posibilidad de sacar dinero sin coste hasta en cinco ocasiones en cualquier cajero del mundo. Además, en caso de domiciliar una nómina de 600 euros, obtendríamos 150 euros de regalo.

Y si acepto vincularme, ¿puedo ganar algo?

Depende del banco. Con Bankinter, además de no pagar comisiones, es posible ganar hasta 350 euros con la Cuenta Nómina al 5% TAE, la cuenta con la mejor remuneración del mercado actual. Para poder beneficiarnos de estas ventajas, será necesario, además de domiciliar una nómina de 800 euros, domiciliar tres recibos al trimestre y efectuar tres movimientos trimestrales con la tarjeta asociada a la cuenta, cuya expedición es gratuita. Sin embargo, si nos hemos beneficiado de esta rentabilidad durante los últimos 12 meses, no será posible abrir la cuenta.

Con Banco Mediolanumtambién podemos obtener algo de rentabilidad si nos vinculamos, concretamente hasta un 2% TIN (1,40% TAE) si se contrata la Cuenta Evolución, una cuenta que remunera al 1% TIN el saldo comprendido entre los 1.000 y los 5.000 euros o al 2% TIN el capital situado entre los 5.000 y los 10.0000 euros. Para poder beneficiarnos de la rentabilidad, será necesario disponer de algún producto por un valor mínimo de 25.000 euros gestionado por la entidad (fondos, planes de pensiones o seguros de vida) y cumplir con una de las condiciones del programa Mediolanum a Tu Medida, como, por ejemplo, domiciliar una nómina o pensión de cualquier importe.