XXI Congreso CEDE

Naturgy y Repsol coinciden en pedir un marco estable y no descartar a ninguna tecnología energética

“El mundo es muy duro y la intermitencia de las renovables la va a tener que pagar el ciudadano, hay que explicárselo”

El presidente de Naturgy, Francisco Reynés
El presidente de Naturgy, Francisco ReynésMaximo Garcia de la PazMaximo Garcia de la Paz

El presidente de Repsol, Antonio Brufau, ha advertido de que no se pueden cambiar las reglas de juego “a medio partido” y los inversores van a retraerse a la hora de invertir en Europa y en España “si no ven un marco legal estable y de largo plazo”. Por su parte, el presidente de Naturgy, Francisco Reynés, ha defendido una regulación “justa que no impida el desarrollo” y ha lamentado que las empresas estén “en la picota” y acaben “pareciendo responsables” de algo que no se entiende “bien”. Brufau y Reynés han coincidido en buena parte de sus reflexiones en el marco de uno de los paneles dedicado al sector energético del XXI Congreso de directivos CEDE, que se celebra en Bilbao.

En su intervención, el presidente de Repsol ha indicado que la legislación debe velar por la industria en general y ha advertido de que “el gran error de partida”, -que es falso- es pensar que “electrificación es igual a descarbonización”. “Si creemos esto vamos a construir un país muy mediocre porque, de alguna forma, la electrificación no puede llegar casi a la mitad de la economía de este país”, ha advertido. En este sentido ha asegurado que los políticos “tienen que aceptar la neutralidad energética y dejar competir a todo el mundo”, ha dicho en referencia a todas las tecnologías que participan en el “mix” de generación eléctrica.

Además, Brufau ha demandado que no se renuncie a explorar los recursos propios. “En el País Vasco hay gas. Hay que seguir con las renovables, pero tienen un coste de producción y de consumo. Los costes van a ser mayores por al intermitencia de las renovables y eso lo va a tener que pagar el ciudadano y hay que explicárselo”. “El mundo es muy duro y necesita energía de todo tipo. Europa ha reducido emisiones, pero no el planeta. Lo que ha hecho Europa es exportar emisiones en mayor cantidad y empleo de calidad (en referencia a la deslocalización). Tenemos que reflexionar ya aprender de los errores”, ha añadido.

“Si lo que hacemos es prohibir una serie de cosas y solo aceptar una, en lugar de incentivarlas todas, es intervenir sobre el mercado de una forma equivocada, porque en el mercado tú no intervienes prohibiendo, intervienes regulando, ayudando a que todo el mundo sea competitivo”, ha manifestado.

Brufau ha añadido que, si se acepta el principio de neutralidad tecnológica, la ciencia “va a trabajar mucho”, por ejemplo, para que los motores de combustión “sean mucho más eficientes” y cree que habrá tecnologías disruptivas. “Demos papel a la ciencia”, ha dicho.

Por su parte, el presidente ejecutivo de Naturgy, Francisco Reynés, ha defendido también una regulación “razonable, justa y que no impida el desarrollo”. “La gestión regulatoria se convierte en un aspecto fundamental”, ha añadido.

Reynés ha señalado que hay dos conceptos fundamentales que son el “realismo”, a la hora de “establecer objetivos que sean alcanzables” y el segundo, transparencia, sobre todo, “en los costes, en los precios y en las hipotecas, porque las decisiones que se toman tendrán repercusión en personas, en la sociedad, en empresas y familias”.

Reynés ha considerado que no se deben “denostar tecnologías ni ninguna fuente de suministro” y ha añadido que, en el caso de las renovables, “no hay ninguna duda de que hay que apostar por ellas”.

Reynés ha añadido que el gas natural es también una materia prima “necesaria” y hay que asegurar su suministro en condiciones “competitivas”. Ha indicado que, “desgraciadamente”, está afectado por la “especulación de la guerra de Ucrania” y, por ello, Naturgy ha salido diciendo “con voz propia” que hay que buscar una solución para que no interfieran los precios especulativos derivados de la guerra en los contratos a largo plazo, sobre todo por las empresas.