Bankia devuelve 5.000 euros a cada afectado por cláusulas suelo

El presidente del banco promete «velar» por los pequeños accionistas en la fusión con BMN. El Estado ingresará otros 209 millones tras acordarse una subida del 5% en el dividendo

Como ya hizo con las preferentes y la salida a bolsa, Bankia decidió hace un par de meses poner en marcha un sistema rápido de devolución del dinero a los afectados por cláusulas suelo abusivas, de modo que ya ha pagado una media de 5.000 euros a cada uno de los clientes con esta disposición en su hipoteca. En total, se han devengado 127 millones de euros entre 25.000 afectados y se espera que a finales del mes de abril estén cerrados los 8.000 casos que quedan por solucionar.

Éste fue uno de los datos que expuso el presidente de la entidad, José Ignacio Goirigolzarri, ayer, durante la junta de accionistas que se celebró en Valencia, y en la que mostró su satisfacción por el estado del banco, el cual calificó como el más «solvente, eficaz y rentable» de las seis grandes entidades que operan en España.

En su resumen del año pasado, explicó que durante el proceso de restitución de la OPS –salida a Bolsa de la entidad–, que duró tres meses, se devolvieron un total de 707,7 millones de euros a la práctica totalidad de los accionistas del tramo minorista, una operación con la que considera que se ahorraron 400 millones de euros en intereses y gastos judiciales.

La junta de accionistas aprobó un beneficio en 2016 de 804 millones de euros, un 8,4% menos que en 2015. Esta disminución se debe, entre otros factores, a la caída del margen de intereses por los menores ingresos generados por la cartera de bonos, así como al efecto de la disminución del euribor.

En el capítulo de comisiones se produjo una bajada del 11,4% con respecto al año anterior, en parte debido a la estrategia de posicionamiento de la entidad. Otro de los puntos que se enmarcan en esta estrategia, y que constituye uno de los objetivos básicos del banco para los próximos años, es el incremento de los clientes atendidos por un gestor personal.

Concretamente, aspira a que en 2019 haya 3,3 millones de clientes que cuenten con la atención personalizada de uno de estos expertos, prácticamente el doble de los 1,8 millones de usuarios de la entidad que contaban con este servicio al cierre del año pasado. El presidente explicó además que la relación de los clientes con el banco es cada vez más «multicanal». El 30,2 por ciento de todas las operaciones las realizan los clientes a través del teléfono móvil.

En referencia a la fusión con el Banco Mare Nostrum (BMN), que se prevé esté cerrada a finales de este año, indicó que a partir de ahora es momento de empezar a estudiar y analizar la situación de ambas entidades. Aseguró que la operación tiene un «sentido industrial porque «además de la posibilidad de generar sinergias, existe una gran complementariedad de redes y mercados atendidos» por ambas. En los mercados naturales de BMN, sobre todo Murcia, Baleares y Granada, la presencia de Bankia es muy «escueta» tras el cierre de sucursales al que le obligó Bruselas tras recibir ayudas públicas. El banquero insistió en que la operación debe analizarse «con especial cautela» y se comprometió a defender los intereses de los pequeños accionistas en la operación. Para tener sentido, apuntó, debe crear valor.

La junta aprobó asimismo una reducción del capital en 6.334 millones para incrementar las reservas voluntarias y un «contrasplit» o agrupación de acciones de una acción nueva por cada cuatro antiguas. De esta forma, explicó Goirigolzarri, se aumenta el precio de los títulos, puesto que algunos inversores no compran acciones demasiado bajas de cotización. Además, dio el visto bueno al reparto de 317 millones en concepto de dividendos, un 5% más que el pasado año. Con ello, el Estado, propietario a través del FROB del 65,9% de Bankia, ingresará 209 millones de euros.

Por su parte, los accionistas que intervinieron durante la junta avanzaron que su próxima batalla será la devolución de los gastos financieros de las hipotecas, mientras que los representantes de los trabajadores pidieron no ser los paganos de la posible fusión con BMN.

Pérdidas en BMN

BMN entró en pérdidas en el ejercicio 2016 al registrar un resultado neto atribuido negativo de 39 millones de euros, frente al beneficio de 64 millones de euros que obtuvo el año anterior. Este resultado fue consecuencia del importe total de provisiones, deterioros y pérdidas por ventas, que ascendió a 422 millones de euros, de los que 119 millones de euros correspondieron a dotaciones no recurrentes extraordinarias.