Las bonificaciones de los bancos con las hipotecas pueden encarecer en préstamo final en lugar de abaratarlo

Cada vez son más las personas que se deciden por comprar una vivienda en nuestro país. El número de hipotecas firmadas en España en 2024 se incrementaron en un 11,2% respecto al pasado año, según los datos aportados por el Instituto Nacional de Estadística. Las entidades bancarias registraron un tipo de interés medio del 3,25%. A la hora de firmar una hipoteca, los nuevos propietarios deberán escoger entre un interés fijo o variable, lo que determinará en gran medida la cuantía que tendrán que abonar mensualmente al banco para cumplir con el pago de su hipoteca.

Con el objetivo de reducir los tipos de interés que tendrán que pagar los propietarios al asumir su hipoteca, las entidades bancarias suelen ofrecer una serie de productos asociados que permiten a sus clientes acceder a tipos de intereses más bajos. Al contratar directamente estos servicios con el banco, la cuantía mensual de la hipoteca se ve reducida gracias a esta disminución de los tipos de interés.

Sin embargo, los nuevos compradores deben tener cuidado a la hora de firmar su hipoteca en el banco, ya que estas bonificaciones en los tipos de interés pueden implicar una serie de compromisos futuros al contratar determinados productos, los cuales podrían llegar a perjudicar considerablemente la economía de estas personas.

¿Con que productos asociados debo tener cuidado al firmar mi hipoteca en el banco?

Uno de los productos asociados más extendidos a la hora de firmar una nueva hipoteca en el banco es la domiciliación de la nómina. Las entidades bancarias suelen ofrecer jugosos descuentos en los tipos de intereses aplicados a las hipotecas, siempre que los titulares de las mismas decidan ingresar mensualmente su sueldo en una cuenta de su misma entidad. La domiciliación de diferentes recibos asociados a los suministrosde la nueva vivienda también puede ayudar a reducir el tipo de interés a la hora de firmar una hipoteca.

Los seguros también son otro de los productos que más suelen ofrecer los bancos para ayudar a reducir de forma considerable los tipos de intereses de sus hipotecas. Además de los clásicos seguros de hogar y vida, los seguros de protección de pagos también se han extendido en gran medida entre las entidades bancarias en los últimos años. Estos seguros garantizan a los nuevos propietarios el pago de la cuota mensual asociada a su hipoteca, en casos de desempleo o de baja por enfermedad o accidente. La cuantía de estos seguros dependerá de la duración de los mismos, y es uno de los productos con los que más cuidado deben tener los españoles a la hora de firmar una hipoteca.

Estos productos podrían incrementar en más de un 40% el precio de tu hipoteca

Es importante que revises bien todos los productos asociados que te ofrecerán en el banco a la hora de firmar una hipoteca, ya que según un famoso asesor financiero éstos pueden hacer que pierdas grandes cantidades de dinero con el paso del tiempo. En uno de los últimos vídeos que ha publicado en redes sociales, Luis Romaguera Salort explica por qué debemos tener cuidado cuando nos ofrezcan bonificaciones por domiciliar la nómina, contratar seguros, planes de pensión o incluso abrir cuentas de ahorro. Si bien es cierto que las entidades bancarias aplicarán un descuento en el tipo de interés de tu hipoteca, éste puede terminar siendo contraproducente con el paso del tiempo.

Este experto en finanzas explica a través de un ejemplo por qué es importante evaluar el coste que tendrán algunos de estos productos en el precio final de la hipoteca: Los bancos suelen ofrecer seguros de hogar vinculados a la hipoteca por valor de 400 euros al año, cuando estos seguros pueden encontrarse en el mercado a mitad de precio. Un hecho que también se repite con los seguros de vida, aunque estos dependerán en gran medida de otros factores como la salud. Uno de los seguros con los que más cuidado debemos tener es con el de protección de pagos, que según este experto “está muy de moda y podemos verlo por unos 5.000 euros con coberturas de cinco años”. Si sumamos la diferencia de costes de estos productos y lo multiplicamos por unos 30 años de hipoteca, el coste final de la hipoteca puede llegar a incrementarse en más de 30.000 euros.