Cataluña, en el furgón de cola del crecimiento el año que viene

El PIB catalán sólo crecerá un 2,5% en 2016, según la media de las previsiones. BBVA vaticina que sólo Asturias lo hará peor

Todos los servicios de estudios pronostican que 2016 será un buen año para la economía española en términos de crecimiento, aunque no tan bueno como éste por la ralentización global que se prevé. Si se cumplen las previsiones, el PIB crecerá entre un 2% y un 3%, por debajo del 3,3% que espera el Gobierno para este ejercicio. Esta desaceleración, sin embargo, no afectará en la misma medida a todas las comunidades autónomas. Entre las que, a priori, parece que van a salir peor paradas estará Cataluña.

BBVA Research, Funcas, Ceprede e Hispalink creen que su crecimiento se resentirá sensiblemente y se situará en la parte baja del ranking autonómico. Según el consenso de estos centros, la riqueza de Cataluña se incrementará un 2,5% el año próximo, por debajo de la media nacional –2,6%–. Sólo cinco comunidades avanzarán menos.

La más reciente de las predicciones, el análisis regional de noviembre del BBVA Research, asegura incluso que sólo Asturias –2,1%– crecerá menos que Cataluña –2,4%– el año próximo. A la cabeza de la clasificación que hace el banco estará Baleares, con un 3,3%. En otro análisis monográfico sobre esta comunidad autónoma, el servicio de estudios de BBVA advierte de que, en el pasado, las tensiones financieras acabaron por pasar factura a su crecimiento, algo que puede volver a suceder en 2016.

La semana pasada, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) advirtió de que existen «riesgos muy elevados» para la sostenibilidad financiera a medio plazo de Cataluña dada la dinámica «no decreciente» de la deuda y los riesgos potenciales de liquidez en el corto plazo en ausencia de los mecanismos de financiación del Estado.

La autoridad añade que Cataluña no alcanzará el objetivo de déficit del 0,3% del PIB fijada para 2016 dada la desviación de partida con la que contará, ya que cerrará este ejercicio con un desequilibrio mayor del previsto. Este desajuste probablemente le obligará a realizar más ajustes presupuestarios que podrían impactar en su crecimiento. La duda es si el nuevo responsable de la Generalitat realizará los ajustes necesarios.

Los analistas del BBVA apuntan también a la «incertidumbre política” –sigue sin haber Gobierno más de dos meses después de las elecciones regionales– como otro de los factores de riesgo para Cataluña. En los dos últimos meses, las agencias de calificación de riesgos Moody’s y Fitch han rebajado la nota de la deuda catalana al nivel de bono basura por la inestabilidad que domina la política catalana. En la práctica, a día de hoy este movimiento no tiene ningún efecto práctico. Dado lo maltrecho de sus cuentas, Cataluña hace años que no se puede financiar de forma independiente en los mercados y depende por entero para endeudarse del Estado, que mantiene con vida sus finanzas a través de las líneas de crédito del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA). Cataluña ha recibido ya 52.000 millones de euros por esta vía y recibirá próximamente otros 3.034 millones.

El Centro de Predicción Económica (Ceprede) es otro de los institutos que auguran un crecimiento por debajo de la media para Cataluña el año próximo, un 2,3%. Sólo el PIB de Andalucía -2%-, Asturias -1,2%-, Canarias -1%-, Castilla-La Mancha -1,8%-, Galicia -2,1%- y Madrid -1,7%- avanzará menos que el catalán el año próximo, según este estudio. Para este año, revisó al alza en septiembre las previsiones de crecimiento de todas las regiones, excepcto de Galicia, Canarias y Cataluña.

Las previsiones económicas para las comunidades autónomas que publicó Funcas en octubre sitúan el incremento del PIB catalán para el año que viene en la media nacional, 2,8%. No obstante, esta predicción es cuatro décimas porcentuales inferior a la incluida en la anterior previsión de Funcas de antes de verano. Sólo las revisiones a la baja de La Rioja, con ocho décimas menos, y Navarra y Madrid, con cinco menos, son más severas que la de Cataluña.

En su análisis sobre esta comunidad, Funcas atribuye esta corrección al «acusado cambio de tendencia que se ha observado de forma generalizada en los índices económicos». Incluso los aspectos que mejoran lo hacen por causas ajenas a la dinámica económica. La Fundación de las Cajas de Ahorros destaca dos aspectos que mejorarán en la economía catalana: el PIB per cápita y el desempleo.

No obstante, atribuye ambas mejoras a la caída prevista de la población, en ambos casos por encima de la media nacional. Abundando en el declive poblacional, BBVA Research advierte de que el aumento del PIB per capita por la caída de población denota «una pérdida de capacidad productiva» de Cataluña.

Hispalink, un proyecto conjunto de una red de equipos de investigación de 16 universidades, pronosticaba en julio que seis comunidades autónomas crecerán más que Cataluña –2,5%– el año que viene: La Rioja –3%–, Comunidad de Madrid –2,9%–, Navarra –2,8%–, Región de Murcia –2,8%–, Canarias –2,8%– y Baleares –2,6%–. Entre las incertidumbres que detecta está la capacidad de la economía catalana para conseguir que el cambio de ciclo genere empleo neto de forma rápida.

Casi cinco puntos menos de competitividad

Desde 2007, Cataluña ha perdido casi cinco puntos de competitividad. Según el índice regional que elabora Ceprede, su nota es ahora de 111,8 puntos, frente a los 116,8 que tenía en 2007. No obstante, Cataluña se sigue manteniendo como la cuarta comunidad con mejor nota, por detrás del País Vasco (135,5), Navarra (126,1) y la Comunidad de Madrid (123,2). Esta última es la comunidad que más terreno ha perdido en este aspecto, 5,1 puntos. A la cola de este indicador se sitúa Baleares, con 68,2 puntos, seguida de Extremadura, con 68,7 puntos. Ceprede elabora este medidor seleccionando un total de 18 indicadores relacionados con los ocho campos que analiza: aspectos macroeconómicos, mercado laboral, desarrollo empresarial, infraestructuras e innovación. Cataluña ha vivido una buena primera mitad del año, con un crecimiento vigoroso, pero la desaceleración del segundo semestre ha sido también muy acusada. El consumo se ha desacelerado y sobre él descansa buena parte del crecimiento económico. Según el servicio de estudios de BBVA, el turismo extranjero empieza a notar los primeros síntomas de agotamiento. El informe de situación reconoce que las incertidumbres política, no sólo las dificultades financieras, han pasado factura a Cataluña.