El Gobierno elevará sobre el 1% la caída del PIB

En las nuevas previsiones macroeconómicas que España, remitirá próximamente a Bruselas, dentro del Programa de Estabilidad, el Gobierno revisará notablemente su estimación de caída del Producto Interior Bruto (PIB) para 2013. Fuentes solventes confirmaron a este periódico que se trabaja con un escenario en el que esa caída del PIB se eleve por encima del 1 por ciento (oficiosamente se apunta al 1,2 por ciento). En cualquier caso, estará por debajo del decrecimiento del 1,5 por ciento anticipado para este año por el Banco de España, aunque esta revisión supondrá, en cualquier caso, un «golpe» importante. Para empezar, se traduce en que se empeorarán también las previsiones de desempleo, por encima del 26 por ciento.

Con este movimiento el Gobierno impone, finalmente, el realismo sobre unas últimas previsiones que fueron consideradas inciertas por la mayoría de los organismos internacionales y nacionales. En aquel cuadro macroeconómico, que acompañó en septiembre a los Presupuestos Generales del Estado, el Gobierno estimó una caída del PIB del 0,5 por ciento. Una tasa de paro del 24,3 por ciento y un déficit del 4,5 por ciento. Las estimaciones de Bruselas apuntan, sin embargo, a que el PIB menguará un 1,4 por ciento; el paro se irá al 26,9 por ciento; y el déficit, al 6,7 por ciento. Mientras que el Banco de España ha calculado una tasa del PIB del -1,5 por ciento; del desempleo, del 27,1 por ciento; y un déficit del 6 por ciento.

Cabe destacar que una caída del PIB del entorno del -1,2 por ciento es muy parecida a la última previsión del BBVA (-1,1) y este informe sostenía que llegaríamos al 27 por ciento de paro.

En la última sesión de control al Gobierno celebrada en el Congreso de los Diputados antes de la Semana Santa, el presidente Mariano Rajoy anticipó que su equipo económico trabajaba ya en esta revisión de las previsiones económicas. «Hay factores que sin lugar a dudas nos pueden obligar a ello. Por ejemplo, la situación de nuestros socios comerciales, la financiación de la economía o lo que ocurra con la senda de consolidación fiscal», defendió.

Desde el Gobierno justifican esta rectificación de las cifras macroeconómicas en que se trata de un «procedimiento habitual» para adaptarse a la percepción de la realidad. También explican que las cifras del programa de estabilidad deben ser «conservadoras» para dar credibilidad a toda la senda presupuestaria. Y siguen sosteniendo, asimismo, que no prevén nuevos ajustes para este año, y que Europa tampoco nos los está demandando. «El programa de estabilidad de España tiene que contener una previsiones realistas y prudentes para aportar credibilidad sobre la economía», sostienen fuentes del Ministerio de Economía. El elevado desempleo, las estrictas condiciones monetarias y los salarios más bajos reducirán aún más el gasto doméstico y la débil demanda interna harán de contrapeso a las exportaciones. En este contexto, los objetivos de déficit establecidos inicialmente por Bruselas para 2013 y 2014 son inalcanzables dentro del ejercicio de «realismo y prudencia» al que apelan desde el Ejecutivo. No obstante, para 2014 el Gobierno prevé un crecimiento cercano al 1 por ciento, en consonancia con las últimas estimaciones tanto de Bruselas como del Banco de España. En el último Plan Presupuestario remitido a la Unión Europea también se preveía una rebaja sustancial de la prima de riesgo, que hoy se aleja cada vez más por muchos factores, entre ellos el contexto de alta incertidumbre derivado de la crisis chipriota y la posible, y temida, nueva oleada de fugas de capital en los países del Sur.