Finanzas

La gran banca bate su récord de beneficios en España tras rozar los 8.000 millones

Santander, BBVA, CaixaBank, Sabadell, Bankinter y Unicaja Banco elevaron sus ganancias en sus matrices españolas un 38,5%, pero siguen con baja rentabilidad, por debajo de su valor en libros y sin cubrir el coste de capital

Fachada de la sede del Banco de España, situada en la madrileña Plaza de Cibeles
Fachada de la sede del Banco de España, situada en la madrileña Plaza de CibelesLuis DíazLa Razón

La gran banca española -integrada por Santander, CaixaBank, BBVA, Sabadell, Unicaja Banco y Bankinter- ganó en 2022 la cifra récord de 20.850 millones, un 28% más que durante el año anterior. Sin embargo, el sector apunta que, pese a sus abultados beneficios, en términos absolutos su rentabilidad sigue siendo baja, especialmente en el negocio en España, que no cubre el coste de capital, lo que explica que, en gran medida, los bancos sigan cotizando en bolsa por debajo de su valor contable. Pese a ello, las matrices españolas de estos grandes bancos lograron un beneficio récord durante 2022 al alcanzar, de forma agregada, unas ganancias 7.540 millones, lo que supone un 38,5% más en tasa interanual, tras haber eliminado en los resultados de 2021 el efecto de la plusvalía de 4.300 millones de euros por la fusión de Bankia y CaixaBank y los casi 900 millones de euros en Bankinter por la segregación de Línea Directa.

Este incremento en su resultados se produjo por un aumento del margen de intereses tras la subida de tipos de interés, un 12,2% en tasa interanual, por el incremento de las comisiones, en un 6,1%; por la reducción de los gastos de explotación debido a los planes estructurales de ajuste de plantilla, un 10,2% y, finalmente, por una caída en las provisiones del 212,5% por la tendencia a la baja en la morosidad y de la gradual normalización de la economía tras la pandemia. Así lo recoge el informe bancario anual de Neovantas.

Para los analistas de la consultora, gracias a estos resultados la banca ha "disparado" los dividendos de sus accionistas en los próximos meses. Así, Santander repartirá el mayor volumen, 3.800 millones, el 40% del beneficio a partes iguales entre dividendo en efectivo y recompra de acciones. CaixaBank distribuirá el pay out más elevado de la banca entre sus accionistas, el 55% del beneficio, lo que supone 1.700 millones de euros, a través de un dividendo en efectivo de 0,2306 euros brutos por acción. BBVA repartirá un dividendo equivalente a 0,5 euros por acción, lo que supone un pay out del 47%, mientras que Sabadell anunció que sería entre el 31,8% al 50%. Bankinter repartirá 280 millones y Unicaja, 130 millones, el 50% de sus ganancias.

Pese a estas cifras, la consultora subraya que la rentabilidad del sector "sigue siendo baja", con un ROE del 7,1% de media, sin llegar a cubrir el coste de capital, que se situaría entre el 8% y el 10%, dependiendo del perfil de riesgo de cada entidad. Por ello, pese a que la gran banca española se ha revalorizado de media un 24% en los últimos doce meses, "siguen sin alcanzar el valor en libros de las entidades como, por ejemplo, las valoraciones de BBVA y de CaixaBank, que están en el entorno del 80% de su valor en libros", señala el presidente de Neovantas, José Luis Cortina.

Este es uno de los principales argumentos de la banca para rechazar el "impuestazo" del Gobierno que grava con un 4,8% el margen de intereses y las comisiones netas del negocio bancario en España, lo que el Ejecutivo considera beneficios extraordinarios por la subida de los tipos de interés. Por este nuevo gravamen, con el que el Gobierno espera recaudar 3.000 millones en dos ejercicios, las seis grades entidades pagarán este año más de 1.100 millones de euros.

En sus previsiones para 2023, Neovantas cree que estas entidades deberán hacer frente a un "entorno macroeconómico incierto", al impuesto temporal a la banca y las medidas de alivio hipotecario aprobadas por el Gobierno y a la que se adscribieron todas las entidades. El sector ya se ha comprometido a asumir medidas de alivio para los hogares con rentas inferiores a 29.400 euros anuales y con hipotecas variables cuyas cuotas suban más de un 20% y consuman más de un 30% de sus ingresos.

En este contexto, prevé que la morosidad suba y alcance niveles superiores al 5%, desde el último dato disponible del 3,68% de noviembre de 2022. Esto podría hacer que la banca eleve sus provisiones en 2023, reduciéndose así la expectativa de beneficios que se previa a la subida de tipos de interés. Una situación que ya se estaría produciendo en la gran banca de Estados Unidos, en la que el aumento significativo de las provisiones en el último trimestre de 2022 ha provocado que se reduzcan sus beneficios respecto a 2021. Por ejemplo, JP Morgan recortó sus ganancias un 22%, Bank of América, un 14% y Citigroup, un 32%.