La banca aún mantiene inmuebles por valor de 83.409 millones de euros

Las entidades financieras españolas mantenían en sus balances cerrados a 31 de diciembre del pasado año activos adjudicados o recibidos en pago de deudas de los negocios en España por importe de 83.409 millones de euros, según consta en el Informe de Estabilidad Financiera que ayer publicó el Banco de España.

Se trata de la tercera subida consecutiva semestral, desde que este indicador alcanzara sus máximos histórico en junio de 2012 al rozar los 100.000 millones de euros. La cifra mínima (en torno a los 75.000 millones de euros) se registró en junio de 2013 después de que la banca traspasara parte de sus activos inmobiliarios a la Sareb, una entidad privada creada para ayudar al saneamiento del sector financiero español, y en concreto de las entidades que arrastraban problemas debido a su excesiva exposición al sector inmobiliario. Su misión es gestionar y comercializar su cartera de activos valorados en 50.781 millones de euros en un plazo de 15 años, buscando la máxima rentabilidad.

La mayor parte de estas adjudicaciones corresponden, según el informe del banco central, a activos procedentes de financiaciones destinadas a las actividades de construcción en inmobiliaria, y en particular a suelo, que con el 38% encabeza la distribución, por delante de edificios terminados (25,3%) y adquisiciones de viviendas (20,6%).

Descienden las provisiones

Los activos dudosos totales de las entidades financieras españolas descendieron en diciembre un 10,2% en términos interanuales, disminuyendo su peso en el balance total desde el 6,4% de diciembre de 2013 al 5,6%. El pasado ejercicio ha sido el primero desde el comienzo de la crisis económica en que este indicador ha caído también en términos absolutos. Esta mejoría ha venido motivada por lo ocurrido en el mercado doméstico, en el que la reducción se cifró en un 12,1%. En las actividades en el extranjero de los bancos españoles, los activos dudosos totales ascendieron un 5,3%, un crecimiento sin embargo menor al observado en el total de activos, por lo que su peso relativo en el balance bajó algo, aunque menos que en España, donde pasó del 2,3% al 2,1%. Este descenso de los activos dudosos ha venido acompañado de una disminución de las provisiones para insolvencias y riesgo país del 8,6% en diciembre de 2014.

Las entidades financieras españolas concedieron alrededor de 280.000 millones de euros en crédito nuevo al sector privado residente y no residente entre los meses de marzo de 2014 y enero de este año, según el Informe de Estabilidad Financiera.

El Banco de España ha advertido al sector de que, a pesar de su proceso de reestructuración, y la consiguiente disminución de empleados y oficinas, mantiene su tradicional modelo de negocio minorista, «aún con una relativamente extensa red de sucursales de pequeño tamaño». En concreto, respecto a los máximos de 2008, el número de oficinas se ha reducido en un 30 %, y en un 25 %, el de los empleados.

El organismo alerta de que los muy bajos tipos de interés, que presionan sustancialmente a la baja los márgenes, junto con un nivel de actividad bancaria que todavía sigue contrayéndose, «va a obligar a los bancos a seguir reflexionando sobre el papel que juegan las oficinas en su estrategia de negocio».