Déficit público

Las comunidades del PSOE rechazan el objetivo de déficit del 0,3% del PIB

El secretario de economia del PSOE, Manuel de la Rocha, junto al secretario de politica federal del PSOE, Antonio Pradas.
El secretario de economia del PSOE, Manuel de la Rocha, junto al secretario de politica federal del PSOE, Antonio Pradas.larazon

-El cambio político surgido de las elecciones autonómicas y locales del pasado 24 de mayo le estalló ayer al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en pleno Consejo de Política Fiscal y Financiera

-El cambio político surgido de las elecciones autonómicas y locales del pasado 24 de mayo le estalló ayer al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en pleno Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF). Todas las comunidades lideradas por el PSOE, sin excepción, rechazaron los objetivos de déficit público para los próximos ejercicios. Castilla y León (PP) se abstuvo, y varias regiones advirtieron de posibles incumplimientos de la senda de estabilidad ya en el presente cierre presupuestario. La senda de estabilidad fue ratificada por el Gobierno pese a la oposición de la mayoría de las autonomías.

«La votación de la senda de estabilidad ha sido en clave política y sabíamos que necesitaríamos una segunda vuelta», apuntó Montoro, que quiso destacar el «compromiso» de todos los gobiernos autonómicos con la estabilidad presupuestaria. «Allí –en la reunión del CPFF– nadie ha pedido más gasto, sino más ingresos», dijo el ministro, que advirtió de que «el Gobierno aplicará con todo rigor la Ley de Estabilidad Presupuestaria». Además, el ministro señaló, tras el adelanto de la segunda fase de la reforma del IRPF, que «hay gobiernos autonómicos a los que no les gusta que bajemos los impuestos».

En vez de ceñirse a los objetivos de déficit autonómico fijados en el Plan de Estabilidad (0,3% del PIB el año que viene), las comunidades del PSOE pidieron al ministro que relaje este límite al 1,4% (once décimas, unos 12.300 millones de euros de gasto público adicional para las regiones) y que la Administración central tenga un objetivo del 1,1%, frente al 2,2% previsto. «El mayor esfuerzo en los últimos años ha correspondido a las comunidades autónomas», señaló Manuel de la Rocha, secretario de Economía del PSOE, por la mañana en rueda de prensa.

La consejera de Economía de Castilla y León, por su parte, tildó de «exigente» el objetivo de déficit del 0,3% del PIB para el año que viene. Antes de la reunión planteó la posibilidad de que el límite se ampliara «al 0,4% o al 0,5%», y finalmente protagonizó la única abstención en la votación de la senda de estabilidad.

El consejero de Economía de la Generalidad de Cataluña, Andreu Mas-Collel, pidió al ministro un objetivo del 1%, cuatro décimas por debajo de las exigencias del PSOE, y también censuró el reparto del conjunto del desequilibrio. «El 0,3% para las comunidades es una décima parte. Esta propuesta es vivir en un mundo de ficción, vivir en la irrealidad», dijo Mas-Collel. Con la propuesta catalana, el conjunto de las regiones tendría derecho a gastar unos 7.800 millones de euros más de lo pactado.

Pese al rechazo de nueve comunidades que votaron en contra (las seis del PSOE, Canarias, Cantabria y Cataluña), Montoro utilizó la mayoría absoluta del Gobierno para ratificar los objetivos de déficit autonómico para los próximos ejercicios (0,7% en 2015; 0,3% en 2016; 0,1% en 2017 y equilibrio en 2018). Además, recordó a las regiones que el control del desvío presupuestario ha sido el origen de la recuperación económica y de la creación de empleo.

De las cinco regiones gobernadas por el PP, cuatro respaldaron al Ministerio de Hacienda (Madrid, Murcia, La Rioja y Galicia) junto a Ceuta y Melilla. Navarra y País Vasco no asistieron a la reunión.