Los tipos cero de Draghi rebajan el beneficio de Bankia

El banco obtiene 481 millones, un 13,4% menos que en 2015

Bankia obtuvo un beneficio neto atribuido en el primer semestre del año de 481 millones de euros, un 13,4% menos que en el mismo periodo de 2015. A pesar de este descenso, la caída podría rebajarse hasta el 8,7% si se tiene en cuenta que, en los resultados de 2015, el Grupo incluía en su balance la actividad del City Nacional Bank of Florida, vendido en octubre del año pasado, y que ha afectado notablemente al balance del banco.

Por trimestres, la entidad consiguió elevar el beneficio atribuido, un 3,5% en el segundo trimestre de 2016 con respecto el primero, hasta situarse en 245 millones de euros (237 millones en el trimestre anterior). Además, el margen bruto durante este periodo alcanzó los 1.683 millones.

La entidad ha conseguido mantenerse y evitar una mayor caída en sus beneficios. Estos resultados se han visto perjudicados por la decisión del BCE de bajar los tipos de interés a cero. La depreciación de los bonos de la Sareb también ha contribuido a este descenso. A pesar de ello, tal y como destacó ayer el consejero delegado de Bankia, José Sevilla, durante la presentación de resultados, «la contención de costes y la bajada de las provisiones por dudosos nos permiten mantener unos altos niveles de rentabilidad».

Según refleja el balance del Grupo, el saldo de dudosos en el primer semestre se situó en 11.751 millones, 1.244 millones menos que en el mismo periodo anterior. Esta rebaja en el saldo ha permitido a la entidad situar el ratio de morosidad en el 9,8%, la primera vez en diez años que se encuentra por debajo del 10%. En relación a la eficiencia, la entidad mantiene una de las mejores tasas del sector, 46,6%. Los recursos de clientes minoristas aumentaron considerablemente hasta junio: fondos de inversión (7,3%), cuentas a la vista (27,2%) y cuentas de ahorro (12,7%).

En relación a futuras reestructuraciones de plantilla, José Sevilla aclaró que Bankia no llevará a cabo despidos ni recortará su red de sucursales, y aseguró que el ajuste realizado en 2013, en el que cerraron una de cada tres oficinas y redujeron su plantilla de 20.500 empleados a 13.500 fue suficiente. Por ello, «ese ajuste lo hemos realizado y lo damos por hecho. No vamos a acometer acciones adicionales», dijo Sevilla.

El consejero delegado del Grupo también quiso pronunciarse ante la demanda de Iberdrola por la Oferta Pública de Suscripción (OPS) de Bankia en 2011. Sevilla considera que existen «muchos argumentos» para que la demanda de Iberdrola «no prospere y se muestra seguro de que la entidad ganará los procesos judiciales.

Iberdrola, compañía presidida por Ignacio Galán, fue uno de los inversores institucionales que decidió comprar acciones de Bankia con su salida a Bolsa. La eléctrica compró títulos por valor de casi 70 millones de euros. Tras las pérdidas sufridas con esta adquisición, Iberdrola demandó a Bankia el pasado mes de mayo por este motivo y reclama 12,4 millones de euros, equivalentes a las pérdidas en su inversión.