Infraestructuras
OHLA logra dos nuevos contratos portuarios en Barcelona y Fuerteventura por 95 millones
La compañía acometerá varias obras de ampliación en ambas infraestructuras
OHLA, a través de su filial SATO (Sociedad Anónima Trabajos y Obras), ha sido adjudicataria de dos nuevos proyectos en los puertos de Barcelona y Puerto del Rosario (Fuerteventura) por un valor conjunto superior a los 95 millones de euros, según ha informado la firma en un comunicado.
En el Puerto de Barcelona, el contrato ha sido adjudicado por la Autoridad Portuaria a la unión temporal de empresas (UTE) formada por SATO y Rubau, y contempla la construcción de tres nuevos muelles para la futura terminal de ferris en el muelle Adosado. Con un presupuesto de 54,6 millones de euros y un plazo de ejecución de 51 meses, la intervención incluye la ampliación de la infraestructura existente mediante la ejecución de nuevos atraques con diferentes calados y longitudes.
De acuerdo con OHLA, la solución constructiva elegida se basa en la utilización de cajones de hormigón armado, los cuales descansarán sobre una base de escollera y banqueta, generando una plataforma "estable" y "duradera" para la operativa portuaria.
La actuación contempla asimismo la ejecución de rellenos y la formación de una nueva explanada, junto con la instalación de equipamientos portuarios y redes de servicio.
Como parte de los trabajos previos, está incluida la retirada de los restos del pecio "Oberón", hundido en la zona donde se ubicará uno de los muelles.
"Este conjunto de infraestructuras permitirá la puesta en marcha de una nueva terminal 'ro-pax' de carácter permanente, con cuatro puntos de atraque y una configuración optimizada para el tráfico de pasajeros y vehículos, lo que dotará al puerto de mayor versatilidad operativa", ha detallado la compañía.
Por su parte, en Puerto del Rosario (Fuerteventura), la UTE ejecutará un nuevo dique y muelle comercial por un importe de 40,6 millones de euros.
El objetivo de esta actuación consiste en reforzar el abrigo de la zona sur del puerto, mejorando la maniobrabilidad de los buques y la protección de las instalaciones, y también en habilitar un nuevo muelle destinado preferentemente al tráfico de combustibles, "clave" para el abastecimiento energético de la isla.
El proyecto abarca una solución mixta que combina un primer tramo en talud y un segundo tramo de dique vertical con capacidad de atraque.
OHLA ha destacado que una de las "singularidades técnicas" de esta obra es el empleo de cubípodos de hormigón como elemento de protección del dique en su zona exterior, lo que permitirá "una mejor resistencia frente al oleaje y las condiciones marítimas adversas".
A su vez, la intervención comprende la incorporación de bloques de gran tonelaje y un espaldón de hormigón armado para minimizar los efectos del rebase. La infraestructura se completará con instalaciones para suministro de servicios básicos a buques, así como elementos de defensa y atraque.