Entrevista

Olga Muntané: "Quien ocupa un cargo tiene que valer para ello, sin importar si es hombre o mujer"

La directora de Organización t Procesos de Cellnex España propone un itinerario real y práctico para lograr la igualdad de género en las empresas

Olga Muntané, directora de Organización y Procesos de Cellnex España
Olga Muntané, directora de Organización y Procesos de Cellnex EspañaDavid JarLa RAZON

La igualdad de género en las empresas ha avanzado mucho en los últimos años. Sin embargo, aún hay trabajo por hacer, como se apuntó en el II Foro de Liderazgo Femenino celebrado en LA RAZÓN el pasado martes. El foro, cuyo lema fue "Mujeres transformando el mundo empresarial. Porque la igualdad de género no es un tema de mujeres, es un tema empresarial", contó con la participación de cinco mujeres que ocupan altos cargos de diferentes compañías, líderes en su sector.

Olga Muntané, directora de Organización y Procesos de Cellnex España, fue una de ellas y destacó durante el coloquio las líneas a través de las cuales debería desarrollarse la actividad empresarial para lograr la plena igualdad de derechos y oportunidades profesionales para hombres y mujeres.

- ¿Qué momento vivimos en cuanto a igualdad de género, dentro de las empresas?

- Se ha avanzado mucho de un tiempo a esta parte, pero aún tenemos mucho por delante. Las cuotas de género hoy en día son incómodas, pero necesarias, aunque no a cualquier precio. Quien ocupe un cargo o puesto a cualquier nivel tiene que valer para ello, independientemente de su género.

Creo que hoy es muy necesario visibilizar y concienciar a las niñas y estudiantes universitarias de que ellas pueden acceder a cualquier ámbito o sector. En el nuestro, las telecomunicaciones, la presencia femenina es minoritaria, al igual que en el resto de sectores relacionados con las disciplinas STEM, pero poco a poco vamos dando pasos importantes, y como ejemplo puedo poner a Cellnex, que en el año 2017 tenía a una sola mujer en el Consejo de Administración y hoy, por el contrario, son mayoría.

Fomentar la diversidad y el talento femenino es un activo muy importante en la estrategia empresarial de Cellnex.

- En España el 78% de las empresas ve favorables las políticas de igualdad, pero sólo el 4% las pone en práctica. ¿Qué solución tiene esto?

- Creo que antes de proponer nuevas fórmulas normativas o legales se debería lograr que se cumplan las que ya tenemos, pues no son malas medidas, únicamente están mal aplicadas.

- Las matriculaciones de mujeres en grados del ámbito STEM apenas llegan al 35%, ¿es posible revertir esta situación?

- Desde Cellnex estamos decididos a lograrlo. Por ello acudimos periódicamente a colegios y universidades, a las aulas, para explicar y poner de manifiesto, ante las alumnas, referentes reales de que una mujer puede no solo acceder, sino también triunfar y prosperar profesionalmente en un sector que tradicionalmente ha sido masculino. Poco a poco lo vamos consiguiendo y vamos logrando crear conciencia al respecto.

En Cellnex desarrollamos programas para potenciar el talento femenino, programas de mentoría y de desarrollo para romper sesgos sectoriales y los llamados techos de cristal, así como talleres donde, junto a altos cargos de la empresa, las mujeres exponen su visión de las cosas y proponen soluciones. Muchas de ellas son implementadas y aplicadas, y gracias a esto vamos avanzando hacia la plena igualdad.

La compañía está ahí, para las mujeres, pero son ellas quienes tienen que tomar la iniciativa para lograr el cambio.

- Qué hay de la conciliación? ¿Realmente es posible?

- En Cellnex y por la pandemia, la flexibilidad y el telerabajo vinieron para quedarse. Creemos que la desconexión es esencial para lograr una buena conciliación entre el trabajo y la vida familiar o personal, y por eso hemos implementado medidas como el teletrabajo al 60%-40% entre presencial y en remoto.

Otras medidas que hemos puesto en marcha en Cellnex, y que tienen una excelente aceptación, son, por ejemplo, que no se puedan convocar reuniones o la flexibilidad en la respuesta de correos electrónicos a partir de cierta hora de la jornada, respetando el horario laboral de cada persona para se pueda logar esa preciada y tan necesaria desconexión.

Estas medidas tienen una gran aceptación y todas las empresas deberían implementar programas de este tipo, que respeten el horario, las vacaciones y el descanso de sus empleados. Además, las nuevas generaciones d etrebajadores demandan estas medidas por encima de otros factores, como una mejor remuneración económica, por ejemplo.

Por último, la igualdad salarial creo que debe ser sobre la base de derechos y oportunidades, es decir, que si se vale para un puesto, lo más justo es que se retribuya ese trabajo de una manera acorde. La igualdad de género en las empresas no está reñida con la meritocracia.