Repsol celebra sus 25 años en bolsa como una firma global ante «una nueva etapa»

Repsol ha celebrado hoy el vigésimo quinto aniversario de su salida a Bolsa, veinticinco años en los que la petrolera ha pasado de ser una empresa pública centrada en el refino a una "compañía energética integrada y global"que se siente preparada para emprender "una nueva etapa".

Su presidente, Antonio Brufau, ha destacado hoy durante el acto oficial del aniversario en el parqué madrileño que la empresa aborda una nueva etapa "ilusionante"una vez cerrado el conflicto con el Gobierno argentino por la expropiación de YPF hace dos años y tras nombrar consejero delegado a Josu Jon Imaz, que ha vivido hoy su primer acto público desde que asumió el cargo.

Repsol nació en 1986 a partir de un grupo de compañías públicas del sector del petróleo y el gas integradas en el Instituto Nacional de Hidrocarburos (INH), como paso previo a la liberalización del sector exigida en la entrada de España en la Comisión Económica Europea (CEE).

Hace hoy veinticinco años, Repsol sacó a Bolsa un 26 % de su capital social, la operación de mayor volumen en las bolsas españolas en aquellos momentos -estuvo valorada en 135.000 millones de las antiguas pesetas (811,36 millones de euros)- y el primer paso en el proceso de privatización de la petrolera pública, que se prolongó durante ocho años.

Aquel día, la demanda de acciones, que se estrenaron a un precio de 1.700 pesetas por título (algo más de diez euros), multiplicó por cinco la oferta, un éxito bursátil que incluso dificultó la operación la jornada del estreno.

Desde entonces, Repsol ha abonado en concepto de dividendos 16.019 millones de euros, mientras la capitalización bursátil de la empresa se ha multiplicado por 8,5 veces hasta los 26.338 millones de euros.

Brufau ha defendido que fue precisamente este hecho, el "someternos a las disciplinas del mercado", el que ha permitido al grupo alcanzar su posición actual, tanto exploración y producción como en refino, marketing e innovación.

El presidente también ha tenido palabras de agradecimiento para sus accionistas, porque "todo lo que hemos construido durante estos veinticinco años hubiese sido imposible sin su confianza", y ha trasladado personalmente este sentimiento a los muchos pequeños accionistas que han estado presentes en el acto.

A esta operación le siguieron otras colocaciones de paquetes accionariales en el mercado en 1992, 1993, 1995, 1996 y, la última, que supuso la salida completa del Estado de la compañía, en abril de 1997.

En esos años también se sucedieron los hitos en la historia del grupo, como la segregación de Campsa en 1991 y, muy especialmente, la adquisición de YPF en 1999, entonces la mayor compañía privada de petróleo y gas de Latinoamérica.

Precisamente en estos días la petrolera española culmina la salida del capital de la argentina, dos años después de la expropiación y tras un duro periodo de negociaciones para alcanzar una compensación sin que este proceso afectara financieramente al grupo.

En esta "nueva etapa"que ahora emprende la petrolera, su equipo directivo se ha comprometido "a seguir trabajando con el esfuerzo, el talento y la ilusión que la compañía se merece", según ha destacado hoy Brufau acompañado del nuevo consejero delegado.