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Banco Santander

Un gran mecenas de la universidad española

La Razón
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La faceta de Emilio Botín como banquero es la más conocida y valorada, pero su curiosidad intelectual y su disposición al emprendimiento provocaron que dirigiera acertadamente sus miras a otras áreas ajenas al ámbito exclusivamente financiero. Por ello, no puedo olvidar en mis palabras su papel como uno de los grandes mecenas e impulsores de la Universidad española actual. Cuando llega a la presidencia, en 1986, España acababa de ingresar en la Comunidad Económica Europea. El país atravesaba un momento de apertura que algunos visionarios como Emilio Botín supieron entender y aprovechar. Sobre este escenario de reformas también se constituyó la Universidad Nebrija, institución que presido y con la que Emilio Botín ha mantenido una estrecha vinculación desde sus inicios. Recuerdo la primera visita que realizó a la Universidad Nebrija, justo después de su aprobación como universidad privada por las Cortes Generales. Estaba realmente interesado en los parámetros económicos de estas nuevas universidades pero también en la oferta académica y en las instalaciones dispuestas para ello. Y es que Don Emilio consideraba la formación como la clave del mañana, el pilar incuestionable del futuro.

Creía en una universidad con enfoque internacional y formación en competencias y, de hecho, su propio perfil profesional y humano podría servir de ejemplo a los estudiantes, futuros líderes sociales, políticos y económicos. Destacaría su visión estratégica e internacional, su capacidad de emprendimiento bajo un análisis riguroso y una acertada predisposición al riesgo, su integridad personal, su olfato para los negocios y su don para la comunicación. Estas competencias, idóneas para cualquier titulado universitario, unidas al ejemplo que obtenemos de su gestión, bien podrían resumirse en una serie de máximas que aplicamos en la Universidad Nebrija: experiencia, visión, compromiso, humildad, intensidad y organización.

Otra columna estratégica compartida entre Banco Santander y la Universidad Nebrija es la ya mencionada perspectiva internacional. Este enfoque común se aplicó en el informe «La internacionalización de la empresa española como protagonista de nuestra economía», realizado por la Cátedra Nebrija-Santander en Dirección Internacional de Empresas y presentado el 3 de junio de 2003 en el Campus de La Berzosa por el propio Emilio Botín y José María Aznar. Como se puede observar, su interés por la Universidad era notable. Sobresale el proyecto que desarrolló desde la Fundación Marcelino Botín, que fomenta la investigación científica, el patrimonio histórico y el desarrollo de las Ciencias Sociales. Desde el Banco y la Fundación desplegó una amplia colaboración con las universidades españolas e iberoamericanas que se intensificó a través de la creación de la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes para la custodia de textos literarios en lenguas hispánicas y la red de universidades Universia.

Quizá sea este proyecto el que recoja con mayor intensidad la visión estratégica e internacional de Emilio Botín, ya que igual que Banco Santander es hoy un referente financiero mundial, Universia es un símbolo vivo de la necesaria colaboración entre universidades para la transferencia de conocimiento y la transformación del sistema. La curiosidad intelectual de Emilio Botín y la preocupación por revertir en la sociedad española los frutos de su éxito empresarial le llevaron también a la acción en el ámbito cultural. Supo trasladar su entrega y dedicación a sus familiares y celebró los éxitos alcanzados por su esposa, Doña Paloma O'Shea, en la divulgación, creación, formación e investigación musical a través de la Fundación Albéniz. En reconocimiento a su enorme labor en el campo musical, la Universidad Nebrija nombró a Paloma O'Shea doctora honoris causa el 2 de junio de 2011. El pésame de la comunidad Nebrija y el mío personal a su esposa, familiares y amigos.