Unión Europea

Van Rompuy se declara «muy preocupado» por la crisis de Chipre y pide que se resuelva «lo antes posible»

Bruselas avisa de que la alternativa al rescate es la quiebra del país

El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, se ha declarado este miércoles "muy preocupado"por la crisis en Chipre tras el rechazo del Parlamento de la isla al rescate pactado por el Eurogrupo y ha pedido una solución "lo antes posible".

"La actual situación de gran estabilidad en Chipre es perjudicial, especialmente para los ciudadanos chipriotas, y debe resolverse lo antes posible", ha dicho Van Rompuy en una comparecencia en la Eurocámara.

"Es necesario que cuanto antes se encuentre una solución porque el tiempo apremia. No es una cuestión de semanas. Y la UE está abierta a otras soluciones y estamos dispuestos a mostrar solidaridad con un préstamo de 10.000 millones de euros, que es más del 50% del PIB del país", ha resaltado.

"El principal objetivo es garantizar la sostenibilidad a largo plazo del sector financiero en Chipre e impedir que las deudas bancarias se conviertan en deuda pública excesiva", ha explicado Van Rompuy.

El presidente del Consejo Europeo ha asegurado que "en toda Europa, los ahorros de los depositantes están garantizados hasta 100.000 euros", pese a que el plan de rescate de Chipre imponía una tasa del 6,75% a las cuentas de menos de 100.000 euros. "La situación del sector financiero en Chipre es muy específica, tanto por su tamaño como por su estructura", ha justificado.

Por su parte, el vicepresidente de la Comisión, Maros Sefcovic, ha dicho en el mismo debate que "continuamos pensando que se puede encontrar una solución, pero necesitamos la plena cooperación de las autoridades chipriotas".

"La alternativa a esta situación es la bancarrota del país y pérdidas financieras para los ciudadanos chipriotas", ha avisado. "Queremos evitarla y queremos contribuir a la solución", ha apuntado. Sefcovic ha dicho que tanto el presidente, José Manuel Durao Barroso, como el responsable de Asuntos Económicos, Olli Rehn, "trabajan duro"para encontrar una solución.