Coronavirus

Sánchez sigue sin concretar su plan a las comunidades

El presidente defiende el mando único pese al fracaso y vuelve a chocar con los mandatarios autonómicos

Coronavirus disease (COVID-19) outbreak in Ronda
Sánchez presidió ayer la séptima reunión con los presidentes autonómicosJON NAZCAReuters

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, remitió ayer a las comunidades autónomas a la decisión que adoptará este martes el Consejo de Ministros sobre el proceso de desescalada. La séptima reunión del presidente con los dirigentes autonómicos no sirvió para avanzar en la definición de ese plan, que se hará público mañana. Sánchez apeló a la prudencia, se comprometió a tomar en cuenta los informes remitidos por las autonomías y que han elaborado sus propios grupos de trabajo atendiendo a las singularidades de sus territorios, y poco más en relación a esta cuestión.

A medida que han ido avanzando estas reuniones territoriales de los domingos, también ha ido creciendo la crítica de los presidentes de las CC AA porque se les informe de las decisiones sin dejarles participar en las mismas. En el plan de desconfinamiento será el mando único el que dirija el proceso sobre unos criterios comunes, aunque se acepte la asimetría por territorios.

El mando único fracasó en la centralización de las compras por la falta de músculo del Ministerio después de décadas de descentralización de la competencia de Sanidad. Pero un criterio único en todas las decisiones es necesario para garantizar también que se salve el Estado de las autonomías frente a lo que sería avanzar en un proceso de reinos de Taifas. La Generalitat catalana aprobó el pasado sábado su propio plan para el regreso a la «nueva normalidad».

La falta de una estrategia nacional para encarar la desescalada ha llevado a muchas comunidades a diseñar sus propios planes. Lo han hecho con independencia del signo político, y así entre el jueves y el viernes se los hicieron llegar al Gobierno, por ejemplo, Canarias (PSOE-UP), Comunidad Valenciana (PSOE-Compromis), Andalucía y Madrid (PP-Cs) o País Vasco (PNV-PSE). El viernes Moncloa se vio obligada a salir a corregir a todas las comunidades, y advirtió de que será el Gobierno el que coordinará este proceso.

Las comunidades esperaban a la Conferencia de Presidentes de este domingo, pero no se han producido avances en la concreción. Cada uno de los presidentes desarrolló su monólogo y el jefe del Ejecutivo les emplazó a la decisión que adoptará su Gobierno el martes. El presidente de la Generalitat, Quim Torra, y el «lendakari», Íñigo Urkullu, volvieron a reclamar ser ellos los que dirijan la salida de sus comunidades. Sánchez defendió que hay que ser «muy prudentes porque ningún país ha completado un proceso de desescalada, todos nos guiamos por los expertos y por la Organización Mundial de la Salud». El presidente también insistió en que la salida debe ser «gradual, asimétrica y coordinada» porque «todos debemos regirnos por las mismas reglas hasta que haya vacuna o tratamiento para la covid».

El plan que aprobará mañana el Consejo de Ministros tiene como base el informe de recomendaciones presentado por el ministro de Sanidad, Salvador Illa, y que el Gobierno hizo llegar a las comunidades el pasado viernes en la reunión del Consejo Interterritorial de Salud. Indica genéricamente que las cuatro capacidades estratégicas del sistema sanitario necesarias para comenzar la desescalada son la asistencia sanitaria reforzada (en la red hospitalaria y en la atención primaria), la vigilancia epidemiológica, la identificación y contención de fuentes de contagio y su aislamiento en domicilio o en instalaciones habilitadas y la protección colectiva.

Esta semana también se prevé que se ponga en marcha la comisión parlamentaria sobre el Pacto para la Reconstrucción. En algunas comunidades, como Valencia, Aragón, Castilla y León o Andalucía, han avanzado notablemente en la búsqueda de acuerdos entre los gobiernos y los grupos de la oposición. Y también se están tendiendo puentes en el ámbito municipal. Sin embargo, a nivel nacional todavía no hay señales claras de que el diálogo pueda concretarse en acuerdos de entidad. PSOE y Unidas Podemos presentaron su propuesta de comisión, que el martes debatirá la Mesa y la Junta de Portavoces, pero sin haber consultado a la oposición. El PP también ha elaborado su propia propuesta. Los grupos deberán decidir el formato y la presidencia de la misma, y ahí se verá si se impone la mayoría de izquierdas.