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Navarra debería ser intervenida con 16 pacientes más en Uci

La Comunidad Foral suspende dos de los tres criterios fijados por Sanidad

La paciencia que tan rápidamente se le agotó con Madrid, parece infinita para Navarra. De momento, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, no va a aplicar el estado de alarma en la Comunidad Foral. El decreto milimétricamente dibujado por el Ministerio de Sanidad para dejar sin puente a la capital va a permitir de momento moverse a los ciudadanos de la región que dirige la socialista María Chivite, pese a que la evolución de la Covid en Navarra adquiere niveles preocupantes.

Mucho mayores que en Madrid, en donde las medidas de contención del Ejecutivo regional de Isabel Díaz Ayuso han logrado invertir la curva de manera radical, sorprendiendo a todos los epidemiólogos. De momento, Navarra supera dos de los tres topes fijados por Illa y también por Moncloa. Suspende en incidencia acumulada de casos diagnosticados en los últimos 14 días, al registrar 675,31 por cada 100.000 habitantes. Madrid llegó a superar los 800, pero el viernes eran ya 540,64 y el sábado bajaban hasta 460 por 100.000 habitantes, 40 menos que el umbral de 500 que Sanidad dibujó como umbral sin ninguna referencia internacional que lo avalase. Cuando lo hizo, Madrid excedía ese límite. Ya no. Tampoco aprueba Navarra en la llamada positividad de las PCR, lo mismo que Madrid. Entre el 29 de septiembre y el 5 de octubre realizó 1.725,85 pruebas de este tipo por cada 100.000 habitantes. De ellas, el 10,8% fueron positivas. En Navarra, se practicaron en ese periodo 3.271,10. Las positivas fueron un 10,7. Con las procesadas el 6 de octubre pasa algo parecido. En Madrid, el porcentaje alcanza un 15,8%; en Navarra, se quedó en un 9,1%, un dato aislado que no le vale para superar el test tratado por el Ejecutivo central.

La única tabla de salvación de Navarra son los datos de hospitalización y, sobre todo, los de ocupación en las UCIS, especialmente seleccionados por Illa para justificar la intervención. La Comunidad Foral asiste a 242 enfermos Covid en las camas de agudos de los hospitales, lo que equivale a una ocupación del 11,4%. Madrid atiende a 3.256. Sin embargo, ha ido descendiendo a medida que se reducía el número de nuevos contagios. Ayer, la comunidad de Díaz Ayuso contaba con 3.300 camas disponibles de las 17.597 funcionales. De ellas, 14.227 estaban ocupadas y, de ellas, 2.697 lo eran por pacientes Covid, una cifra menor que la contabilizada por el Ministerio el viernes. En cualquier caso, Madrid cuenta con planes de elasticidad que le permiten elevar si es preciso en los propios hospitales, en hospitales de campaña adyacentes, en Ifema y en el nuevo hospital de pandemias que entrará en funcionamiento a finales de mes.

¿Dispone de ese colchón Navarra? No, pero a Illa no parece haberle importado mucho. En UCIS, Navarra cumple y Madrid no, pero depende de los parámetros que se tengan en cuenta. Según los datos del Ministerio, 490 enfermos Covid en estado crítico ocupaban estas unidades en los centros públicos y concertados de la capital, una cifra similar a la que, por la mañana, el consejero de Salud, Enrique Ruiz Escudero, comunicó a sus gerentes en la reunión virtual que mantienen con regularidad desde el estallido de la pandemia. En Navarra, los ingresados en UCI alcanzaban el viernes el número de 30. Con ello, el porcentaje de ocupación en la Comunidad Foral era del 23,26%. Con este porcentaje, Navarra apenas dispone de un margen de 16 pacientes para no ser intervenida por Sánchez. La evolución del ritmo de contagios ha forzado al Ejecutivo regional a aplicar a toda velocidad muchas de las medidas de contención con el fin de no alcanzar el 35% de umbral que forzaría por ley al Gobierno a la intervención. Medidas que ya aplicó, Ayuso, aunque más restrictivas. Mientras que en la capital se restringía la movilidad en 45 áreas sanitarias en Navarra tan solo se limitarán a partir del martes los aforos en hostelería, al 30%, en supermercados al 40%, cierre obligado de locales a las 22:00h, así como la limitación de reuniones a seis personas. Los establecimientos de ocio se reducen al 30%. Chivite aprovechó su intervención de ayer para cargar también contra Ayuso, a pesar de haber puesto un plan en funcionamiento. Lo hizo, descartando un estado de alarma en Navara porque a su juicio en Madrid se aplicó porque Ayuso «no había hecho nada».