La familia la pondrá...

La familia la pondrá en marcha estos días con el objeto de ensalzar los valores de la ex alcaldesa.

La Fundación Rita Barberá está a punto de constituirse, posiblemente este mismo mes de enero, por iniciativa de su familia y con el objetivo de reconocer los valores que caracterizaron su conducta privada y pública: honradez, lealtad, verdad..., según explicaron a LA RAZÓN fuentes de familiares.

Indudablemente, la idea de la fundación surgió desde la perspectiva de ser un instrumento idóneo para recuperar y mantener viva la imagen de la ex alcaldesa de Valencia, que tan injustamente, según los mismos portavoces, fue tratada en determinados ambientes mediáticos y políticos. «No pretendemos defender su gestión politica, que fue refrendada por los valencianos en cinco convocatorias electorales, sino a la persona, que siempre se distinguió por su humanidad y por todas cualidades que queremos fomentar desde este nuevo organismo».

El proyecto ya ha sido refrendado ya por personas, organismos e instituciones que han manifestado su voluntad de ser patronos de la fundación, aún pendiente de definir sus estatutos y organigrama, cuestiones que se cerrarán en las próximas semanas. En cualquier caso, uno de los fines principales es la celebración de actos y actividades para resaltar las virtudes y valores que siempre defendió Rita Barberá, así como reconocer y premiar a personas y entidades que se distingan por ello.

Rita Barberá murió el 23 de noviembre de 2016 de una parada cardiaca cuando se encontraba en Madrid por su actividad de senadora. Inició su carrera política con su afiliación a Alianza Popular en 1976. En 1983 fue elegida como diputada a las Cortes Valencianas, escaño que ocupó hasta junio de 2015 al ser designada senadora territorial por esta institución parlamentaria.

Su labor más trascendental fue como alcaldesa de Valencia, la tercera ciudad de España, desde 1991 a 2015. En su primera legislatura formó coalición con Unión Valenciana y, a partir de 1995, logró cuatro mayorías absolutas consecutivas, durante las cuales su popularidad creció permanentemente hasta llegar a ser conocida como «la alcaldesa de España».

Su gestión catapultó a la capital del Turia tanto a nivel nacional como internacional hasta lograr que fuera visitada por millones de turistas al año, circunstancia desconocida hasta entonces, ya que la ciudad se había distinguido casi exclusivamente por su actividad ferial. Durante su periodo, Valencia se convirtió en un gran escenario de prestigio con la llegada del AVE, la ampliación del Puerto y la red de Metro, la Ciudad de las Artes y las Ciencias, las dos ediciones (32ª y 33ª) de la Copa América de Vela, la ampliación del Jardín del Turia y la Fórmula 1, entre otras, son algunas de las actuaciones más importantes durante su mandato.