Defensa suspende «por precaución» la licencia de vuelo de los A400M en producción

Hasta que no se esclarezcan las causas que provocaron el trágico accidente de un Airbus A400M en pruebas el pasado sábado en Sevilla, el Ministerio de Defensa ha decidido, temporalmente, suspender la licencia para realizar vuelos de los aviones que se encuentren actualmente en producción en proceso de entrega. Es lo que confirmó ayer el ministro Pedro Morenés, durante una entrevista en Onda Cero, porque «no se puede descartar ninguna hipótesis». «No es que sepamos ya algo, sino que, como algo ha pasado, tenemos que tomar todas las precauciones», explicó. Una medida que, sin embargo, no implica detener la línea de montaje que la empresa tiene en Sevilla, donde 20 unidades ya han comenzado a ensamblarse, tal y como confirmaron desde Airbus.

Desde el propio Ministerio aseguraron que lo que se ha ordenado es no emitir, por ahora, el certificado de aeronavegabilidad de dichos aviones, aquellos que están aún en la planta por detrás del que se estrelló, que iba a ser el tercero que se entregase a las Fuerzas Armadas de Turquía. La decisión la toma Defensa, ya que son la Dirección General de Armamento y Material (DGAM) y el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA), adscrito a la Secretaría de Estado de Defensa, los que otorgan estas certificaciones, tal y como marca el Reglamento de Aeronavegabilidad de la Defensa (RAD) de 2004. Estos organismos son los que confirman que un aparato recién salido de la línea de producción es apto para volar.

La compañía, «impactada»

Desde la propia compañía aseguran que la decisión les ha «impactado», porque, salvo los test que se realizan en tierra, «no se podrán realizar pruebas tan importantes como el primer vuelo», por lo que todos los aviones en esta situación deberán esperar para ser entregados, pues han de pasar todos los controles.

Eso sí, al tratarse de una medida temporal, aseguran que es pronto para cuantificar el impacto que tendrá sobre la planificación de futuras entregas, por lo que afirman que colaboran «intensamente» con la comisión de investigación para que se aclare lo ocurrido lo antes posible.

Su intención este año era, de los 20 que ya han empezado a montarse en Sevilla, entregar al menos 14 unidades y, dependiendo de las pruebas en vuelo, podrían ser 18. El resto se entregarían a partir de 2016. En enero es cuando está previsto que el primero de estos aviones de transporte encargados por España llegue al Ejército del Aire.

Esta noticia llegó el mismo día en el que el presidente de Airbus España, Fernando Alonso, demostró su confianza en el A400M realizando un vuelo de prueba entre la planta que la compañía tiene en Toulouse (Francia) y Sevilla. «La tripulación del MSN23 –el avión siniestrado– habría querido que los ensayos del A400M continuaran. El vuelo se ha hecho. Es nuestro homenaje», aseguró, informa Ep. El vuelo partió de Toulouse pasadas las 14:30 horas y aterrizó en el aeropuerto sevillano de San Pablo una hora y 50 minutos después. En concreto, se trataba del avión «MSN4», un aparato propio de Airbus que se emplea para realizar los test y que no corresponde a ningún pedido comercial.

Funeral marcado por el «dolor colectivo»

El arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo, destacó ayer la pena extendida por España y Europa por el fallecimiento de los cuatro miembros de Airbus, cuyas exequias ofició en la Catedral, informa Efe. Durante la ceremonia subrayó «la pena honda» y el «dolor personal y colectivo» que se extendieron desde Sevilla a España y a Europa, donde «todos se suman al llanto de sus familiares y compañeros».