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El «evasor» Trias preside el Comité de Ética del PDeCAT

El ex alcalde de Barcelona, Xavier Trias, en una imagen de archivo
El ex alcalde de Barcelona, Xavier Trias, en una imagen de archivolarazon

Reconoció tener cuentas en Suiza durante toda su carrera política.

La nueva marca de Convergència, el PDeCAT, pretendió borrar a golpe de siglas su pasado con la corrupción, aunque en el casi año y medio de vida no ha conseguido desterrar esa sombra. De forma puntual, ha tenido que arrastrar a lo largo de todo este tiempo con el lastre de algunos casos abiertos, como el «Palau» –a la espera de la sentencia– o el «3%» –todavía en fase de instrucción– como principales ejemplos. Ahora, debe afrontar una nueva losa con la aparición del ex alcalde de Barcelona, Xavier Trias, en los «Paradise Papers» –investigación que está llevando a cabo el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación, y en la que en España participan La Sexta y El Confidencial–. Entre los documentos aparecidos, el nombre del ex alcalde se vinculaba con un «trust» (fideocomiso) familiar administrado por la entidad suiza de banca privada RBS Coutts, existencia que su abogado reconoció anteayer.

Lo paradójico y llamativo de este nuevo caso es el cargo orgánico que ostenta Trias, que preside el Comité de Ética del partido, área a la que se dio vital importancia cuando nació el PDeCAT como elemento para poner más tierra de por medio con la corrupción de Convergència. Pero por el momento parece que Trias va a continuar desempeñando esas funciones, según apuntaron ayer fuentes del partido a este diario. Estas fuentes aseguraron que desde la dirección no se ha objetado nada a Trias, ni tampoco ha habido hasta el momento valoraciones públicas de otros miembros del partido, algo arriesgado teniendo en cuenta la cercanía de las elecciones autonómicas, que se celebrarán el próximo 21 de diciembre, ya que puede ser un asunto que los adversarios políticos podrán rentabilizar.

Además del 21-D, también a nivel municipal va a tener sus negativas consecuencias, ya que tanto Trias como el líder de ERC en el Ayuntamiento de Barcelona, Alfred Bosch, plantearon a la alcaldesa, Ada Colau, sellar un acuerdo para el resto de legislatura si rompía con el PSC. Esta propuesta, muy difícil de cristalizar dado las malas relaciones entre el grupo de Colau y la antigua Convergència, ahora se antoja imposible con este escándalo por medio.

En todo caso, la presidencia del Comité de Ética, además, la lucirá de nuevo dentro de poco, cuando se reúna el órgano de la formación para deliberar qué hacer con el ex conseller Santi Vila por sus críticas contra otros miembros del Govern después de que hubiera dimitido. Hasta entonces, seguirá al acecho su vinculación con este «trust», denonimado «The JTB Family Settlement» y que compartía con sus otros 11 hermanos, que servía para ocultar fondos.

Este fideocomiso estuvo activo entre 1994 y 2008, cuando Trias ostentó distintos cargos institucionales –tanto en la Generalitat como en el Congreso de los Diputados– y se disolvió el 4 de enero de 2013, cuando había asumido ya las riendas del Ayuntamiento de Barcelona –estuvo entre 2011 y 2015–. Ahora, además, Hacienda podrá actuar de oficio, con lo que abirá una investigación.

Lo cierto es que el ex alcalde, cuando aparecieron estas informaciones, negó rotundamente que tuviera nada que ver. Pero con el paso de los días, ha ido variando su versión, hasta que su abogado reconoció la existencia de este fideocomiso. «Esto lo montó su padre y lo heredó su madre, y la verdad es que a ellos no les llegó nada. Pero lo que pasa es que no tengo pruebas para demostrarlo», aseguró el letrado. La familia ahora está buscando pruebas para demostrar su inocencia al respecto, porque según el abogado, los padres no explicaron nada a los hijos con el objetivo de «protegerles». En todo caso, aparte de este «trust», Trias aparece relacionado con otros dos subfondos vinculados a la misma entidad bancaria suiza, aunque en este caso eran propiedad de la madre, Maria Vidal de Llobatera Bassols.