Congreso de los Diputados

El "finiquito"de hasta 7.000 euros de los diputados enciende el debate: ¿Es justo?

La campaña "Si no curras, no cobras"ha logrado casi 750.000 firmas y la polémica se ha vuelto "viral".

La campaña es Change.org ha sido la más secundada en 2019
La campaña es Change.org ha sido la más secundada en 2019larazon

La iniciativa "Si no curras, no cobras"se ha convertido en la más secundada en Change.org de 2019 y la polémica se ha vuelto "viral".

A pesar de tratarse de una legislatura fallida en la que no se ha podio sacar adelante ninguna iniciativa por la falta de acuerdo para lograr un gobierno, los diputados tienen derecho a un suculento "finiquito". Buena parte de los 350 diputados que componen el Congreso -todos menos los que forman parte de la Diputación Permanente- tienen derecho a una indemnización que supone cobrar entre 6.000 y 7.500 euros y un gasto global que supera el millón y medio de euros.

Este "finiquito"viene siendo objeto de debate en redes sociales desde hace días e incluso llevó a poner en marcha una iniciativa ciudadana en Change.org. La campaña "Si no curras, no cobras", que a día de hoy apoyan casi 750.000 firmas, reclama a los diputados que renuncien a su indemnización. La indignación es tal que esta petición se ha convertido en la más secundada de 2019.

Ayer, la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, defendía el pago de la indemnización que los diputados pueden cobrar tras la disolución de las Cortes porque entiende que es una medida "justa"por el impacto que la actividad política supone en la carrera profesional y laboral de quienes dan este paso. "Se trata de algo que no es nuevo y que se aplica desde hace mucho tiempo", subrayó.

La justificación de Batet no parece haber convencido mucho y la polémica está servida. Cientos de comentarios han hecho arder twitter contra un "privilegio político"que consideran injusto.

Esta situación ya ocurrió el pasado mes de mayo, cuando, al disolverse las cortes, 216 diputados (prácticamente todos los que podían pedirla) pidieron su indemnización y la cobraron. Solo cinco renunciaron a ese dinero.