Madrid

«El novio de la muerte» no desaparece

La Cofradía de Mena solventa los «malentendidos» con el nuevo párroco

Caballeros legionarios del Tercio Duque de Alba, II de la Legión, trasladan al Cristo de la Buena Muerte desde su capilla al trono en el que esta noche desfilará por las calles de Málaga.
Caballeros legionarios del Tercio Duque de Alba, II de la Legión, trasladan al Cristo de la Buena Muerte desde su capilla al trono en el que esta noche desfilará por las calles de Málaga.larazon

Finalmente, todo quedó en un susto. Después de varios días de dudas y polémica, ante la posibilidad de que a los legionarios de la Cofradía del Cristo de Mena se les prohibiera entonar «El novio de la muerte» en la parroquia de Santo Domingo de Málaga, las aguas parece que han vuelto a su cauce y no habrá veto alguno.

Desde la propia Congregación aseguraron que «una vez salvados los malentendidos entre el Párroco de Santo Domingo y esta Congregación, no existe ningún obstáculo para que en el futuro siga cantándose» esta típica canción legionaria.

La polémica surgió el pasado fin de semana, durante la celebración de la última misa del triduo dedicado al Cristo de la Buena Muerte, cuando el nuevo párroco de la iglesia habría prohibido a los legionarios entonar la canción, como se viene haciendo desde hace 90 años. Una vez concluida la misa, la cofradía se traslada a la capilla en la que se encuentran las imágenes del Cristo y la Virgen de la Soledad, pero allí no pudieron cantar «El novio de la muerte» al tratarse de una canción castrense y no litúrgica. Con la «Salve Marinera», por el contrario, no tuvieron problema alguno.

Ahora, tras casi una semana de nerviosismo en la que incluso el párroco, Juan Manuel Parra, ha negado cualquier prohibición al respecto, la propia cofradía asegura que la relación con el también Director Espiritual de la iglesia de Santo Domingo ha sido y seguirá siendo excelente. Al mismo tiempo, espera dar por zanjada la polémica suscitada.

Es lo que esperan, pues sus tradiciones ya han sufrido algún que otro cambio. Hasta hace poco, por ejemplo, la cofradía era quien protagonizaba la misa de doce de los domingos, pero el nuevo párroco decidió modificar el día de participación de los legionarios y pasarlos a los viernes por la tarde.

Y, por supuesto, confían en que no se cumplan los rumores y temores de muchos de ellos en relación a la Semana Santa y la guardia que realizan al Cristo de la Buena Muerte.