El PP evitará que se vote en Navidad si hay terceras elecciones

Los partidos coinciden en reformar la ley para adelantar la fecha pero no en cómo hacerlo

El portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, aseguró ayer que el su partido «tomará medidas» para que, en el caso de ser necesaria una tercera convocatoria de elecciones, los nuevos comicios no se celebren el día de Navidad. Por su parte, la vicepresidenta del Gobierno aseguró que el Ejecutivo de Rajoy no obstaculizará ningún intento de reforma legal en el sistema electoral español que permita que se acorte el plazo previsto y que, por lo tanto, no haga necesario de haya elecciones el próximo 25 de diciembre sino el domingo anterior, el 18. Estas fueron sus palabras en la rueda de prensa tras el Consejo de ministros que tuvo lugar ayer en Moncloa: «No obstaculizaremos ninguna cuestión de la que puedan devenirse beneficios para los españoles, pero consideramos que unas terceras elecciones son un perjuicio muy importante para los españoles y para el conjunto de la democracia».

Las palabras de Sáenz de Santamaría hacen referencia a una propuesta legislativa que el PSOE ha presentado en el Congreso para reformar la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (LOREG) de manera que se permita acortar en una semana la campaña electoral . Desde las filas del PSOE hubo reacciones a la actitud manifestada por los líderes del PP que se encargaron de recordar que la decisión de planificar para el 30 de agosto la primera votación de investidura de Rajoy fue desde el primer momento una medida de presión de los populares para presionar a Pedro Sánchez a que se abstuviera. En este sentido se pronunció Margarita Robles, quien afirmó que Mariano Rajoy «jugó» con la fecha de las terceras elecciones para presionar a su principal rival político. Robles cree, no obstante, que «es posible» reformar por la vía de urgencia la LOREG para acortar los plazos, aunque se requeriría un consenso amplio con el resto de fuerzas políticas.

Todos los partidos se manifestaron ayer a favor de adelantar las elecciones a la Navidad pero cada uno lo hizo con un matiz distinto. Por ejemplo, Alberto Garzón, mostró que su partido apoyará cualquier iniciativa que adelante las elecciones pero alertó sobre la posibilidad que el PP y el PSOE compensar con la ley electoral la perdida de votos que han sufrido desde la irrupción de las fuerzas del bipartidismo. Por su parte, el portavoz de Izquierda Republicana de Cataluña, Gabriel Rufián, dijo estar sorprendido de que los partidos políticos sean capaces de reformar una legislación tan sensible como la electoral pero que sean incapaces de acordar un gobierno para «su» país. Desde las filas de Podemos se mostraron también favorables a adelantar las elecciones para evitar las navidades, pero con cautela. Fue Xavier Domenech quien rechazó unos comicios el día de Navidad pero no dijo expresamente que su partido apoyaría un cambio legisltivo en este sentido.

Una reforma simple y en poco plazo

Una reforma parcial de la Ley Orgánica del Régimen Electoral sería suficiente para evitar unas elecciones el 25-D, si antes no hay ningún candidato que obtenga la confianza del Congreso. Para ello, lo primero será la presentación de una proposición de ley de modificación de esa ley, lo que ya ha hecho el PSOE, que deberá contar la mayoría absoluta del Congreso, algo que parece que no sería difícil de obtener; y por último, mayoría del Senado, que también saldría si el PP lo apoya. Y de ahí, al BOE.