En busca del déficit asimétrico para evitar el colapso

Barcelona- España no se puede permitir que Cataluña esté en una situación de parálisis económica. Pero ajustar el déficit como pide la Generalitat y buscar solución a los problemas económicos no es fácil. Los equipos económicos del Gobierno y la Generalitat llevan semanas trabajando y ayer todo se precipitó tras la reunión entre Rajoy y Mas para el hombre que lleva los números en la Generalitat, el conseller Andreu Mas-Colell. A las seis de la tarde, se reunió con el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y también cuadró la agenda para mantener otro encuentro con el titular de Economía, Luis de Guindos. El conseller aseguró, tras entrevistarse con Montoro, que habían tratado asuntos «importantes», aunque quiso quitar hierro a una reunión que enmarcó dentro del diálogo habitual.

Las reuniones estuvieron envueltas en mucho secretismo porque ninguna de las partes quiere que se tuerza una operación que puede rebajar notablemente la tensión en Cataluña y contribuir a la gobernabilidad de la única autonomía que no ha presentado los presupuestos.

El encuentro de Mas-Colell y Montoro tuvo lugar en la sede de la Delegación del Gobierno y, sobre la mesa, un sinfín de números. La Generalitat no acepta un techo de déficit del 1,2 por ciento, última ampliación que ha hecho el Gobierno para las autonomías. Cataluña quiere un trato especial porque considera que, tras dos años de presupuestos restrictivos, no puede hacer unas cuentas con unos recortes de unos 3.800 millones que supondrían un ataque al estado del bienestar. Por eso, apuesta por arañar décima a décima sabiendo que es difícil llegar a un reparto simétrico del déficit, o, lo que es lo mismo, tener un techo del 2,1 por ciento del PIB.

Pero, ¿es posible dar un trato especial a Cataluña? Para el PP catalán, esta autonomía podría llegar a tener un déficit entre el 1,5 y el 1,8 por ciento, según explicó su presidenta, Alicia Sánchez-Camacho, horas antes del encuentro entre ministro y conseller. La popular conoce bien los números de Cataluña porque durante los dos años que duró la anterior legislatura hizo posible que Mas aprobara los presupuestos y es partidaria de un déficit asimétrico, de la misma manera que defiende que se compense a las autonomías que sí cumplieron con el déficit en 2012. Hallar un camino que no suponga un enfrentamiento con el resto de comunidades autónomas es la clave.

Fuentes del Ministerio de Economía, por su parte, confirmaron el encuentro de Mas-Colell con De Guindos, en una jornada en que los ministros hicieron una verdadera inmersión en Cataluña. Montoro, por ejemplo, también se vió con empresarios catalanes y representantes de las instituciones económicas y acabó la jornada con una cena con altos cargos del PP.