Caso Bárcenas

Griñán: «Bárcenas no es el PP, aunque le puede estar haciendo daño»

El presidente del PSOE y de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, asegura que el extesorero del PP Luis Bárcenas "no es el PP", aunque le "puede estar haciendo daño", y defiende que "lo importante es que la gente tenga confianza en sus instituciones y en sus partidos".

El presidente del PSOE y de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, asegura que el extesorero del PP Luis Bárcenas "no es el PP", aunque le "puede estar haciendo daño", y defiende que "lo importante es que la gente tenga confianza en sus instituciones y en sus partidos".

Griñán se ha pronunciado de este modo durante una entrevista en Canal Sur Radio, en la que ha asegurado que cree que el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, está acertando en su estrategia ante el 'caso Bárcenas' y ha coincidido con él en que "con la sombra de Bárcenas todos los días es difícil gobernar".

El dirigente socialista ha admitido que "algunos dicen que --Rubalcaba-- tiene que ir más fuerte y otros que más débil"en relación con el caso Bárcenas, pero ha defendido que "se trata de aclarar todo en la medida en que no es posible que cada día este señor dé una noticia que no es agradable".

"Si se aclara absolutamente todo lo relacionado con el caso Bárcenas, quien gana credibilidad es el Gobierno, las instituciones y el país, eso es lo que ha dicho Rubalcaba y eso es lo que yo creo, que con la sombra de Bárcenas todos los días es difícil gobernar", ha añadido el presidente andaluz.

Tras calificar como una "barbaridad"que Bárcenas haya logrado acumular hasta 38 millones de euros, Griñán ha querido dejar claro que "Bárcenas no es el PP, le puede estar haciendo daño, pero entendamos que lo importante es que la gente tenga confianza en sus instituciones y en sus partidos".

En su opinión, "los partidos tienen que ponerse de acuerdo en luchar contra la corrupción, no en utilizar la corrupción contra un partido, sino en luchar contra ella a través de medidas de transparencia, que va más allá de que uno se desnude ante el electorado y diga lo que tiene y lo que gana y de que los partidos hagan lo mismo".

En este sentido, ha defendido que "en la relación entre políticos

y ciudadanos tiene que haber transparencia", para lo que ha propuesto que "los programas deben hacerse de manera que se sepa que se pueden cumplir, actualizados con una memoria económica y que si no se cumplen se dé cuenta inmediatamente en el Parlamento de las dificultades que hay para hacerlo, porque es el contrato más importante cuando la democracia es representativa"

"Si conseguimos todo eso lograremos ciudadanos activos, que confíen en la política y que ellos mismos hagan política", ha concluido.