Audiencia Nacional

Hallan muerta en un hotel a la esposa del senador del PP Tomás Burgo

Tomás Burgos Beteta, portavoz adjunto del PP en el Senado
Tomás Burgos Beteta, portavoz adjunto del PP en el Senadolarazon

María del Mar Rodríguez Alonso, esposa del portavoz adjunto del PP en el Senado, Tomás Burgos Beteta, fue hallada sin vida ayer en un céntrico hotel bilbaíno, según confirmaron anoche fuentes del Partido Popular.

El cuerpo sin vida de la fallecida, natural de Bilbao, aunque residía en Madrid, fue hallado por personal del hotel sobre las dos y media de la tarde, informa Ep. Según otras informaciones, la mujer habría fallecido horas después de ser hallada inconsciente en la habitación del hotel.

Las causas exactas de la muerte de María del Mar Rodríguez las determinará la autopsia que se le practicará al cadáver en las próximas horas, según indicaron a Efe fuentes del Juzgado de Guardia de Bilbao.

Tomás Burgos es uno de los cinco portavoces adjuntos del PP en el Senado, coordinador de comisiones, y senador por Toledo, mientras que su esposa fue administradora única de la sociedad MR, dedicada al mundo de la comunicación y la organización de eventos, alguno de cuyos contratos ha sido objeto de investigación en la red de la «trama Gürtel».

El pasado mes de julio, María del Mar Rodríguez Alonso figuraba en un listado incluido en un auto del juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz, de 45 imputados para ser enjuiciados por su implicación en la trama de corrupción liderada por Francisco Correa.

El instructor mantenía que Rodríguez utilizó su empresa de organización de eventos, MR&Asociados SL, como tapadera para ganar un contrato con el Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón, en Madrid, que en realidad acabó ejecutando el grupo de Correa. Para ello presentó «a medida» el pliego de condiciones al congreso de parques y jardines convocado de urgencia por el consistorio en 2004 y se llevó una comisión.

María del Mar Rodríguez trató de levantar su imputación alegando la falta de motivación del auto y la prescripción de los delitos. Pero las fiscales rechazaron ambos extremos.