La Conferencia Episcopal cuenta con 4,4 millones de euros de presupuesto

El hecho de que los fondos públicos que recibe la Iglesia vayan a quedar afectados por la futura Ley de Transparencia no significa, ni mucho menos, que la financiación de la Iglesia católica en España haya sido hasta ahora opaca. De hecho, la Conferencia Episcopal Española (CEE) publica cada año sus presupuestos, desgranando al detalle de dónde salen sus ingresos y en qué consisten sus gastos. Los últimos datos disponibles, accesibles para todo aquel que quiera consultarlos a través de su página web, en www.conferenciaepiscopal.es, revelan que el presupuesto de la CEE para 2013 asciende a 4.398.675 euros, apenas 11.000 euros más que en 2012.

En lo que respecta a los ingresos, la partida más importante corresponde a la asignación del Fondo Común Interdiocesano, con 2,5 millones de euros. Este fondo se constituye a partir de la asignación tributaria y de las aportaciones de las diócesis, que se efectúan en función de su capacidad potencial de obtención de recursos, medida por el número de habitantes de la zona y su nivel de renta familiar. Aunque son las diócesis las que financian en parte el Fondo Común de la CEE, ésta distribuye posteriormente parte de esos fondos de forma solidaria entre las diócesis que lo necesitan. La otra gran fuente de ingresos proviene de los alquileres de inmuebles, partida de la que espera obtener en 2013 1,1 millones de euros. Además, presupuesta unos ingresos de 547.000 euros gracias a actividades económicas.

Gastos controlados

En el capítulo de gastos, la Conferencia Episcopal prevé que el mayor desembolso corresponderá a las nóminas. Así, los salarios y retribuciones del personal seglar sumarán este año 1,49 millones de euros, y el sueldo de sacerdotes y religiosos se llevará 640.000 euros más. El siguiente gasto más importante es el que supone la conservación de los edificios propiedad de la CEE y sus gastos de funcionamiento, con 914.000 euros presupuestados. Las acciones pastorales y asistenciales que lleva a cabo la institución aglutinan, en conjunto, 985.000 euros.

Con todo, es preciso recordar que en el presupuesto de la Conferencia Episcopal no están incluidas muchas de las actividades asistenciales y solidarias que la Iglesia católica lleva a cabo en nuestro país, tales como sus aportaciones al sistema educativo y sanitario o su actividad en colaboración con ONG como Cáritas y Manos Unidas. Estas dos organizaciones se nutren de las donaciones privadas y subvenciones del Estado, del mismo modo que otros organismos similares. Esto desmonta el mito de que la Conferencia Episcopal únicamente aporta el 2 por ciento del presupuesto de Cáritas, pues esta aportación es en realidad una donación privada de la CEE. Los gastos derivados de la labor social de la Iglesia son cubiertos en buena medida por los 247 millones de euros que 9,1 millones de contribuyentes asignaron a través de su declaración de la renta el pasado año. No obstante, se calcula que la actividad de la Iglesia supone un ahorro de 30.000 millones de euros para las arcas públicas.