La Fiscalía investiga el carnaval de la «caza al español»

Abre diligencias por un delito de incitación al odio en Solsona

La Fiscalía de Lérida ha decidido abrir diligencias de investigación penal por un posible delito de incitación al odio contra los españoles en el carnaval de Solsona. Los hechos tuvieron lugar el pasado sábado 14 de febrero. La Xarxa, televisión pública de la Diputación de Barcelona, retransmitió las fiestas de Lérida, en las que un vecino de la localidad –Valentí Vilagines, ex miembro de la junta de la fiesta–, «pintado» con supuestas magulladuras en la cara a causa de una paliza, responde a las preguntas de un entrevistador de la cadena. «Me han dado una paliza dos del PP, unos de las fuerzas de la ocupación y un banquero», responde el ficticio agredido. La secuencia continúa con jóvenes disfrazados de soldados del Ejército español, al que califican de «la yihad», y para ambientar la recreación se escucha la música de la serie «El Equipo A», mientras se va relatando: «En 1714, el último escuadrón del Ejército catalán fue derrotado por las tropas borbónicas (...) Hoy, perseguido por el Gobierno español, un hombre lucha por la independencia de Cataluña, y no es Mas o Junqueras, sino el Carnaval 2015». En tanto que aparece la enseña española: «Una bandera de las Españas, atención que éstos son los malos seguro». Y así sucesivamente, hasta que llega el momento estelar del desfile, y es cuando aparece el «rey carnaval», no «ése que se ha jubilado, ni su hijo ni la Letizia ni estas historias», sino uno que aparece montado en un jeep y ataviado con una bandera separatista a modo de capa, que se dedica a disparar contra el Ejército español.

Este guión fue altamente valorado por la televisión pública dependiente de la Diputación de Barcelona, en la que gobierna CiU, ya que se retransmitió por una veintena de sus televisiones locales. La plataforma Sociedad Civil también ha tomado cartas sobre el asunto, y ayer publicó una queja en la que denuncia la «indignación por las imágenes» ya que asegura que el clima de convivencia en los pueblos de Cataluña para aquéllos que estén en contra del independentismo es «casi imposible». Personas a las que, asegura, se llega a «demonizar».

Por su parte, el presidente de la asociación, Josep Ramón Bosch, asegura en una conversación mantenida con este medio, que sí se está incurriendo en un delito de incitación al odio. «Si esto ocurriera en Madrid contra los catalanes las consecuencias serían bien distintas. Lo ocurrido en el carnaval de Solsona, y la pasividad ante los hechos es nazismo absoluto», asegura. Pero Bosch no se queda ahí, sino que ubica la responsabilidad en la cúpula del sistema idependentista, concretamente en Artur Mas. «Su lenguaje es bélico y de confrontación», y cita como ejemplo sus declaraciones recientes en el «Año de las Bibliotecas» en la Generalitat: «Agresores de muchas épocas han procurado romper las piernas de la identidad catalana». Bosch confiesa la desventaja en su órdago de denuncia hacia la situación en Cataluña, pero afirma que «lo último es quedarse de brazos cruzados».