Córdoba

La Junta dio 19.000 euros a la ONG que inició la campaña de expropiación

KALA recibió la ayuda tres semanas antes de que comenzara la recogida de firmas

La asociación KALA reconocía en su página en Facebook haber «iniciado oficialmente la petición de firmas para solicitar a la Unesco y a la Junta de Andalucía que tomen las medidas oportunas» para que la Catedral de Córdoba, católica desde hace casi 800 años, pase a ser de titularidad pública.
La asociación KALA reconocía en su página en Facebook haber «iniciado oficialmente la petición de firmas para solicitar a la Unesco y a la Junta de Andalucía que tomen las medidas oportunas» para que la Catedral de Córdoba, católica desde hace casi 800 años, pase a ser de titularidad pública.larazon

En las últimas semanas la figura de Miguel Santiago Losada ha ido adquiriendo cada vez mayor relevancia hasta llegar a convertirse en el principal portavoz de la plataforma para lograr la expropiación de la Mezquita-Catedral de Córdoba. En esta organización, hasta el momento, llevaba la voz cantante Antonio Manuel Rodríguez, que parece haber pasado a un segundo plano después de participar, como ya informó LA RAZÓN, en una conferencia organizada por destacados miembros de la izquierda abertzale, entre ellos el editor de De Juan Chaos, José María Esparza.

Miguel Santiago, profesor de Biología, se define a sí mismo como «cristiano de base» y fue miembro fundador del Comité de Solidaridad de América Latina en Córdoba, asociación de extrema izquierda que actúa «de manera asamblearia y autogestionada desde unos presupuestos feministas, anticapitalistas y antiimperialistas». Numerosos artículos en su página web dan fe del apoyo que esta organización aporta a los regímenes de Nicolás Maduro, Evo Morales y a un amplio elenco de movimientos revolucionarios marxistas en Colombia, Nicaragua y otros países.

Desde 2005, Miguel Santiago ha centrado su actividad en otra asociación de la que es presidente y cofundador: KALA, cuyo principal objetivo parece ser «la integración sociolaboral de los jóvenes inmigrantes». Sin embargo, un vistazo a la página en Facebook de KALA basta para comprobar que el socorro a jóvenes inmigrantes es sólo una de las actividades que realiza esta asociación: «Hemos iniciado oficialmente la petición de firmas para solicitar a la Unesco y a la Junta de Andalucía que tomen las medidas oportunas ante el riesgo que corre su declaración como Patrimonio Mundial de la Mezquita-Catedral de Córdoba», afirma KALA el 13 de febrero de 2014. Esta llamada publicada en Facebook, que al cierre de esta edición llevaba cosechados el nada espectacular número de 6 «likes», no es la única referente a la Catedral. En los días subsiguientes se produjeron 5 publicaciones más referentes al mismo tema (con análogo éxito entre los seguidores de KALA en esta red social).

La evidente implicación de KALA en la campaña de expropiación de la Catedral de Córdoba toma un cariz distinto cuando se repara en la fina y constante lluvia de subvenciones con las que la Junta de Andalucía ha ayudado a esta asociación. Este decidido apoyo institucional da cuerpo a las sospechas de que sea el propio Ejecutivo andaluz el que financia, a través de un entramado de asociaciones y ONG de izquierda más o menos radical, la campaña internacional para lograr que la Catedral de Córdoba, antigua mezquita, pase a ser de titularidad pública. La titularidad pública de la Santa Iglesia Catedral de Córdoba (tal es la denominación con la que fue inmatriculada en el Registro de la Propiedad por el Obispado en 2006) vendría a significar de facto un paso previo a que, cuando ya esté en manos de los dirigentes tradicionalmente laicistas del poder autonómico, se declare el llamado «culto compartido» en este templo en el que se ha venido desarrollando el culto católico desde hace casi 800 años, tras la reconquista de Córdoba en 1263. El impacto que en el mundo islámico tendría este logro es difícilmente predecible ya que este monumento tiene un carácter cuasi mítico para cientos de millones de musulmanes en todo el mundo como símbolo del mayor periodo de esplendor de la cultura islámica y, más concretamente, de su dominio sobre parte de Europa.

La Junta de Andalucía ha financiado las actividades de esta organización casi sin interrupción desde que esta ONG fue fundada por Miguel Santiago Losada en 2005. La primera de las subvenciones es del 1 de octubre de 2006 y el dinero del contribuyente fluyó constantemente desde entonces desde diversas instancias del Gobierno autonómico: la Delegación del Gobierno en Córdoba, la Delegación Territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de Córdoba, etc... El montante total de las ayudas asciende a 76.000 euros y, lo que es más significativo, una de las más abultadas jamás recibidas por la asociación, concretamente de 19.000, fue recibida por KALA el 17 de enero de 2014, apenas tres semanas antes de que la asociación «iniciara oficialmente» la petición de firmas para expropiar la Mezquita-Catedral de Córdoba. El Boletín Oficial de la Junta de Andalucía del 24 de enero demuestra, además, que KALA fue una de las entidades privadas de «acción social» que recibió más dinero en esta batería de ayudas concedidas por la Junta de Andalucía. Sólo en 2011 dejaron de llover las subvenciones del Gobierno autonómico andaluz sobre las arcas de la asociación KALA. En el resto de años desde su fundación, esta ONG recibió puntualmente cantidades de dinero que van, desde los 2.000 euros en 2007, hasta los 20.000 que recibió en 2008. Miguel Santiago fue uno de los portavoces de la plataforma para expropiar la Mezquita-Catedral que se reunieron con el presidente del Parlamento Andaluz, Manuel Gracia, el pasado 16 de mayo.