Tribunal Supremo

Marchena prevé emitir la sentencia del juicio del “procés” antes del 16 de octubre sin lectura pública

En todo caso, las deliberaciones siguen en marcha y este deseo podría verse truncado si el desarrollo de los debates encallan en algún aspecto

El juez Marchena, hoy, durante la apertura del año judicial. (Foto: Cipriano Pastrano)
El juez Marchena, hoy, durante la apertura del año judicial. (Foto: Cipriano Pastrano)larazon

En todo caso, las deliberaciones siguen en marcha y este deseo podría verse truncado si el desarrollo de los debates encallan en algún aspecto

El tribunal de la causa del 'procés' independentista en el Tribunal Supremo sigue deliberando sobre la sentencia que afectará al presidente de ERC, Oriol Junqueras, y a otros once líderes independentistas si bien al presidente de este órgano, Manuel Marchena, le gustaría que pudiera notificarse antes del próximo 16 octubre, tal y como adelantaba hoy LA RAZÓN, fecha en la que se cumplen dos años de ingreso en prisión preventiva de los dos primeros enjuiciados que entraron en la cárcel, el diputado suspendido de Junts per Cat Jordi Sánchez y el presidente de Ómnium Cultural Jordi Cuixart.

¿Cuándo se conocerá la sentencia del “Procés”?

La Ley permite prorrogar por dos años más la situación de prisión preventiva de ambos enjuiciados sin que exista sentencia, por lo que esta previsión puede cumplirse exista o no sentencia por parte de la Sala de lo Penal del Supremo. No obstante, el deseo del presidente de la Sala sería el de tener firmada la resolución antes de dicha fecha, han señalado fuentes jurídicas.

En todo caso, las deliberaciones siguen en marcha y este deseo podría verse truncado si el desarrollo de los debates, que tienen lugar por bloques temáticos, encallan en algún aspecto y complican la redacción final de la sentencia.

No puede hablarse por lo tanto de una fecha segura para el dictado de la sentencia, que seguramente no se conocerá por lectura pública sino que se notificará directamente a las partes personales.

La posibilidad de lectura pública no gusta al presidente del tribunal, según las mismas fuentes, que considera que la simple enunciación del fallo puede llevar a confusión a los ciudadanos, mientras que la lectura total se descarta -la resolución puede extenderse por cientos de folios- y un extracto de su contenido podría interpretarse como interesado.

Tampoco parece que pueda afectar a la fecha de la sentencia el hecho de que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) vaya a resolver el próximo 14 de octubre sobre la inmunidad de Junqueras, que salió elegido europarlamentario en los últimos comicios europeos.

Según fuentes del tribunal, este asunto no afecta a las deliberaciones ni al calendario de la sentencia, y se resolverá lo que proceda -como podría ser la activación de un suplicatorio- en función de cómo resuelva el órgano europeo.

Unanimidad y entorno político

Otro de los aspectos que aún están pendientes es la unanimidad del fallo, que algunos dan por seguro. Las mismas fuentes han señalado que parece lo más probable, dada además la trascendencia política de esta sentencia, si bien hay que tener en cuenta que la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LeCrim) prevé que los magistrados pueda mostrar su discrepancia sobre cualquier aspecto de una sentencia en la que trabajan y anunciar voto particular tanto durante las deliberaciones como en el momento de firmar la resolución.

Además, los votos particulares pueden ser discrepantes, por no estar de acuerdo con la decisión tomada por el resto de magistrados, o concurrentes, es decir, de acuerdo con la decisión del resto pero no con sus argumentos. Se podría dar el caso, siguen las fuentes consultadas, de que respecto de alguno de los bloques temáticos alguno de los magistrados señale que no se ha explicado determinado aspecto tal y como él considera y formule un voto en dicho sentido.

El tribunal sigue trabajando y, según fuentes de este órgano, lo hace sin que tengan entrada en sus sesiones deliberativas ningún aspecto político o de consecuencia política de sus argumentaciones, que son netamente jurídicas. Trabajar de modo contrario, a juicio de los magistrados de este órgano, equivaldría para un tribunal "perder el norte"y "estar muerto", lo que estaría en todo punto fuera de lugar.