Elecciones catalanas

Moncloa insta a Arrimadas a negociar con Podemos para romper el bloqueo

El Gobierno advierte a Torrent de que o presenta un «candidato limpio» o seguirá el 155.

El portavoz Méndez de Vigo, ayer, durante su intervención en el Consejo de Ministros
El portavoz Méndez de Vigo, ayer, durante su intervención en el Consejo de Ministroslarazon

El Gobierno advierte a Torrent de que o presenta un «candidato limpio» o seguirá el 155.

El Gobierno confirmó ayer que estará a lo que digan los letrados del Parlamento de Cataluña sobre si la suspensión del Pleno de investidura del pasado día 31 debe valer para poner en marcha la cuenta atrás de dos meses para unas nuevas elecciones autonómicas si no hay acuerdo soberanista sobre su candidatura. Los letrados parece que se inclinan por el «no», lo que deja en manos de los independentistas el calendario de Cataluña. Para forzar elecciones el Gobierno tendría que pedir apoyo al Senado para ampliar el artículo 155, como ayer informó este periódico. De momento, Moncloa se somete al dictamen de los servicios jurídicos del Parlamento catalán.

El ministro portavoz, Íñigo Méndez de Vigo, aseguró ayer que los mensajes «pillados» al ex presidente de la Generalitat Carles Puigdemont confirman el final de su proyecto político y que ahora es el momento de que la Mesa del Parlamento busque un acuerdo para proponer un candidato. Desde Moncloa señalan a Ciudadanos (Cs) porque la candidatura de Inés Arrimadas, como representante de la lista más votada, podría servir para desbloquear la situación aunque no tenga los votos necesarios para sacarla adelante. «Ciudadanos debe hacer algo e igual que pacta con Unidos Podemos una reforma de la ley electoral también puede hablar con ellos de otra alternativa en Cataluña», indicó el portavoz, para instar a Arrimadas a tantear a los «comunes» a fin de ver si ante el bloqueo están dispuestos a rectificar su decisión de no sumarse a bloque constitucionalista del PP, PSC y Cs.

El Gobierno no se anticipa a futuros escenarios si se mantiene el bloqueo y se limita a señalar que seguirá aplicando el artículo 155 con normalidad, conforme a lo previsto en el acuerdo del Senado, hasta que haya un nuevo gobierno de la Generalitat legítimo. Moncloa hizo balance positivo de la aplicación del artículo 155 y resaltó que tanto el Constitucional, instado por el recurso presentado por el Ejecutivo, como los mensajes de Puigdemont a Toni Comín abren un nuevo horizonte en la política catalana que sólo puede concluir con la investidura de un diputado que no esté imputado. «Si no hubiéramos seguido adelante con el recurso, el Constitucional no hubiera podido emitir su clarificadora resolución y Puigdemont podría haber sido investido telemáticamente», sentenció Méndez de Vigo. Antes de resaltar que esa investidura telemática habría sido un ridículo para España en el conjunto de las democracias europeas porque sobre Puigdemont pesa una orden de búsqueda y captura por delitos muy graves. Después de la polémica que acompañó a la presentación de ese recurso, por el informe en contra del Consejo de Estado, Moncloa se siente ahora en condiciones de sacar pecho por una decisión que entiende que ha contribuido a que «el Estado de Derecho triunfe».

El portavoz del Ejecutivo demandó explícitamente al nuevo presidente del Parlamento catalán, Roger Torrent, que proponga un candidato que no tenga cuentas pendientes con la Justicia para que la Legislatura catalana pueda echar a andar con normalidad. Sólo de esta manera o con unas nuevas elecciones se podría levantar la aplicación de la intervención de la Generalitat.

Asimismo, Méndez de Vigo arropó la decisión de Torrent de suspender el Pleno de investidura que había convocado la semana pasada para investir a distancia a Puigdemont. Éste es el camino, a su juicio, y las fuerzas independentistas deben dejar atrás la vía de la unilateralidad y de la vulneración de las leyes. Deben proponer un candidato «viable» y «limpio» de causas pendientes con la Justicia como las que tienen Puigdemont, huido, o el ex vicepresidente Oriol Junqueras, en prisión preventiva.