Rajoy, ante un mes de decisiones cruciales para el PP

Al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, le espera un mes cargado de decisiones que tomar en el Partido Popular que podrían afectar también al Ejecutivo, y que empiezan esta misma semana con el proceso para elegir al próximo líder del partido en Andalucía.

Mucho tiempo lleva Rajoy respondiendo a la prensa que no tocaba todavía determinar el candidato andaluz o el cabeza de lista para las europeas. Pero esta vez el calendario manda.

El propio PP se ha puesto una fecha límite para resolver la importante incógnita de quién liderará a los populares andaluces y se batirá a la presidenta socialista Susana Díaz en las elecciones autonómicas.

Además, tampoco le queda al jefe del Ejecutivo mucho tiempo para decidir su cabeza de lista a las europeas del 25 de mayo, si quiere llevarlo con él a Dublín para la convención del PP europeo, el 6 y 7 de marzo.

Por de pronto, faltan sólo tres días para saber si habrá uno o más candidatos a la Presidencia del PP andaluz en el congreso regional del 1 y 2 de marzo, ya que el miércoles se acaba el plazo para que quienes quieran optar al puesto presenten los avales -noventa como mínimo- que se necesitan para ello.

El PP trata siempre de acudir a los congresos con el candidato consensuado, pero aún no está claro si eso va a ocurrir en Andalucía, donde sigue habiendo división entre los dirigentes provinciales.

Además, ninguno de los aspirantes que en los últimos meses han estado en las quinielas ha dado el paso aún. Ni siquiera José Luis Sanz, el "número dos"del PP andaluz y la apuesta, según señalan muchos populares, de la secretaria general, María Dolores de Cospedal, y el actual presidente regional del partido, Juan Ignacio Zoido.

Sanz lleva meses encabezando las apuestas, pero ya en noviembre, cuando varios medios de comunicación dieron por hecha su designación, Rajoy aseguró ante el Comité Ejecutivo Nacional que nada de lo publicado era cierto, y esta semana, cuando ha vuelto a sonar su nombre con fuerza, tampoco ha sido confirmado por la junta directiva regional.

"Tenemos que elegir entre todos al mejor", dijo Zoido tras la junta directiva, llamando así a unos y otros al acuerdo, mientras se insistía en que el congreso va a ser democrático y al líder lo elegirán todos los populares andaluces.

Entonces ¿No habrá "dedo divino"?

Esa expresión fue la utilizada por la presidenta del PP madrileño, Esperanza Aguirre -muy dada a opinar de todo en el partido- para reclamar que el nombre no venga de arriba. Vamos, que no lo decidan ni Cospedal, ni Javier Arenas, ni Rajoy.

Pero nadie duda en el PP de que la última palabra la tiene su presidente. Rajoy tiene tres días para dar una señal, interna o pública, de si se decanta también por Sanz o tiene una apuesta distinta.

De forma paralela, el jefe del Ejecutivo tiene otra importante decisión que tomar, y tampoco le queda mucho tiempo para hacerlo: el cabeza de lista europeo.

El PP es consciente de lo mucho que se juega en estos comicios, pues son el primer examen en las urnas desde que Rajoy llegó a La Moncloa, y aunque habitualmente tienen poca participación servirán de termómetro de cara a las convocatorias de 2015.

Toca buscar un número uno de la lista europea que, en palabras de un dirigente popular, provoque una "ilusión inquebrantable"y anime a los votantes habituales a acudir al colegio electoral.

Y para la mayoría, no puede ser otro que el titular de Agricultura, Miguel Arias Cañete, uno de los hombres de confianza de Rajoy y el ministro más valorado del Gobierno,

Aunque su deseo sea ser comisario europeo, numerosos dirigentes populares le consideran el idóneo para pasar esta dura prueba, aunque después se vaya al Ejecutivo de la UE.

Eso obliga, además, a que el número dos de la lista sea otro candidato fuerte, pues tiene todas las papeletas de quedarse de portavoz.

Otro interrogante que se abre es si en su candidatura europea el PP tendrá la vista puesta en las víctimas del terrorismo.

La decisión de Jaime Mayor Oreja de no concurrir en estos comicios, la irrupción de Vox, el partido fundado por José Antonio Ortega Lara y exmiembros del PP críticos con la política antiterrorista, o el fichaje de la expresidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo Maite Pagazaurtundua por UPyD, parece obligar a los populares a mover ficha al respecto.

Entre los eurodiputados populares ya está Teresa Jiménez-Becerril -hermana del concejal sevillano asesinado por ETA-, aunque no se descarta que en la lista del 25 de mayo entren otras caras como la de María del Mar Blanco, hermana de Miguel Ángel Blanco.

Le toca pues a Rajoy tomar unas cuantas decisiones en las próximas semanas, un periodo que se ha limitado aún más con la convocatoria del debate sobre el estado de la nación para los días 25 y 26 de febrero.

Una cita a la que el presidente podría llegar con los deberes hechos en el PP, aunque alguna de esas decisiones le obligue a hacer algo a lo que se resiste abiertamente: cambios en su Gobierno.