Burla de los presos: piden beneficios sin arrepentirse

«Los límites que nos marcaremos a la hora de llevar adelante esta nueva línea serán dos: el arrepentimiento y la delación».

«Los límites que nos marcaremos a la hora de llevar adelante esta nueva línea serán dos: el arrepentimiento y la delación». El documento, aprobado mayoritariamente por el colectivo de presos de ETA, el llamado EPPK, marca las líneas que no van a traspasar en esta nueva etapa», anunciada a bombo y platillo por la ETA «oficial» y las organizaciones de su entorno.

Lo que ocurre es que si un recluso se quiere beneficiar de las medidas hay que pasar, precisamente, por el arrepentimiento y la colaboración para esclarecer los crímenes cuya autoría todavía se desconoce.

En medios antiterroristas consultados por LA RAZÓN se subraya que el comunicado y todo lo que ocurre en el mundo de los reclusos terroristas hay que analizarlo en clave interna. Los «oficialistas», dirigidos desde cómodos despachos del País Vasco y Navarra, han querido demostrar la gran supuesta fuerza que tienen ante el sector «duro», que cada día cuenta con más apoyos en ambas comunidades.

Además, las disidencias en la izquierda abertzale ya son reconocidas oficialmente.

Para tratar de enredar más el asunto, tras asegurar que ni perdones ni colaboración, incluyen en el documento una serie de planteamientos, como si lo del acercamiento de los presos o incluso su liberación, estuviera ya resuelto.

«Dentro de ese contexto general, en la línea jurídica se abrirán diferentes posibilidades en función de la situación jurídica de cada preso. Será cada preso quien decida aprovechar o no las posibilidades que le ofrezca la línea jurídica, será cada preso quien decida utilizar o no las diferentes solicitudes o cauces legales (redenciones, destinos, cambios de grado, permisos, acercamiento a Euskal Herria, libertad condicional, etc.), y, dado que la línea ha sido aprobada de manera colectiva, contará en todo momento con el apoyo y la ayuda del Colectivo. Ese tiene que ser el espíritu del nuevo funcionamiento». Que traducido significa que los que tienen condenas cortas o que van a terminar pronto, van a adelantar su salida de la cárcel. A los que les quedan muchos años...pues a aguantar.

Se jactan de «la lucha por la excarcelación de Josu Uribetxebarria, «Eperra» (uno de los secuestradores de Ortega Lara).

Tras destacar la gran victoria obtenida con 221 síes, frente a 42 noes y otros 38 que no han votado o lo han hecho en blanco (80 en total) anuncian los candidatos que hay para formar la nueva directiva del «colectivo», tanto en España como en Francia. Entre ellos, no está Francisco Javier García Gaztelu, «Txapote», uno de los etarras con más «carisma» dentro de la banda y sí dos que están dos condenados a cadena perpetua en Francia, «Ata» y «Susper», cuyas posibilidades de salir parecen bastantes remotas.