Política

Cataluña

Un presidente seguro de que ha vencido a la crisis

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, durante un momento de la entrevista con Gloria Lomana, directora de Informativos de Antena 3
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, durante un momento de la entrevista con Gloria Lomana, directora de Informativos de Antena 3larazon

MADRID- Mariano Rajoy se sentó anoche ante las preguntas de la directora de Informativos de Antena 3, Gloria Lomana, porque cree que éste es un momento clave de su primer mandato. Un buen momento, con el viento por primera vez a su favor. El presidente está convencido de que con su gestión ha conseguido borrar todos los peligros que acechaban a la economía española y que por delante espera una carrera ascendente hacia el crecimiento y la estabilidad económica. «La subida será más o menos rápida, pero lo malo queda atrás», precisa uno de sus colaboradores. La obsesión de Rajoy es alimentar la confianza en España, dentro de «casa» y fuera de nuestras fronteras. Y ante este objetivo el viaje de la semana pasada a Estados Unidos no le pudo salir mejor, y así lo reconocen hasta las voces más críticas dentro de su partido. Cierto es que la visita a la Casa Blanca le ha llegado en el momento propicio, pero, además, el «trabajo ha lucido» y «las cosas han salido redondas», sostienen sus colaboradores. En este arranque de 2014, a Rajoy la macroeconomía le sonríe y también le aprueban los mercados, los inversores..., todos aquellos que cuando llegó a La Moncloa no dejaban de presionar, de una o de otra manera, para que se rindiese y aceptase el «rescate». Una vez que los que se han rendido han sido los que entre bambalinas especulaban con el futuro de España, en Moncloa reconocen que los retos han cambiado, pero que «siguen siendo difíciles de domar». En la anterior coyuntura o en la que ahora se vislumbra la estrategia del presidente va a seguir siendo la misma. Continuará con sus reformas; esquivará en la medida de lo posible los «líos» y el «conflicto», bien sean de gestión o de equipo; y mantendrá su particular manejo de los tiempos y un perfil moderado. Ajustado a eso a lo que tanto apela en la conversación en el terreno corto, «el sentido común». Algunos de los que le susurran en el oído, como el sociólogo Pedro Arriola, han empezado a advertir de que llega la hora de acercar el discurso a las familias, de bajar de las grandes cifras y humanizarlas para la calle si quieren salir bien parados de las elecciones europeas. A estos comicios les tienen respeto, pero no son la principal preocupación del presidente del Gobierno. Por supuesto que se colocará en la primera línea de salida en la batalla electoral, y que está midiendo sus decisiones y sus elecciones para conseguir ganar al PSOE en un «examen» en el que por tradición los dos principales partidos se tienen muy bien cogidas las medidas. Todo eso está en la agenda del presidente, mas si uno hace caso de lo que cuentan los que comparten con Rajoy el día a día en Palacio lo que realmente le inquieta y le ocupa es la consolidación de la recuperación económica, el empleo, y Cataluña. El partido tiene algunos agujeros territoriales, y la sombra del ex tesorero Luis Bárcenas ha vuelto a levantarse contra el pronóstico de algunos de los que han estado o están en Génova y no han dejado de decirle al presidente que no se preocupe que, por lo que ellos saben, Bárcenas ya no tiene nada más entre manos. Eso está por ver, y a lo que venga Rajoy tendrá que plantarle cara en las próximas semanas y meses en un contexto en el que el PP se sigue viendo vencedor en unas generales, pese al desgaste por la gestión de la crisis que amenaza a la mayoría que hoy ostenta. «Pero, sin duda, los retos son el empleo y Cataluña, problemas de Estado que como tal tienen que gestionarse», sentencia un ministro.