Una cúpula con historial sangriento

El ex jefe de ETA Mikel Antza encabeza la dirección de los

514 presos de la banda terrorista encarcelados en España y Francia

Los 514 presos de ETA en cárceles de España y Francia –una nómina aligerada en los últimos dos meses con la excarcelación de 63 etarras tras la anulación de la «doctrina Parot»– saben muy bien quién lleva la batuta. Seis reclusos de la banda terrorista integran, desde abril del pasado año, la dirección del «Colectivo de Presos Políticos Vascos» (EPPK en sus siglas en euskera), los muñidores del último comunicado con el que quieren reivindicarse como interlocutores «políticos».

Al frente de todos ellos se encuentra el ex número uno de ETA Mikel Albisu, «Mikel Antza» (San Sebastián, 1961), detenido en octubre de 2004 y condenado a 20 años de prisión en diciembre de 2010. Actualmente cumple condena en la cárcel de Lyon (Francia). Antza fue el responsable del «aparato político» de la banda terrorista tras el golpe policial que desarticuló a la dirección de ETA en Bidart. Doce años después, en 2004, ya era el máximo dirigente de la organización criminal, cuando fue detenido en Salis-de-Béarn (Francia), donde vivía junto a su compañera, Soledad Iparragirre, «Anboto», y su hijo. En la operación se incautaron artefactos para activar explosivos que se encontraban «listos para su utilización».

«Anboto» (Eskoriatza, 1961) también formó parte de la dirección de la banda terrorista, encargándose en un principio de las finanzas de ETA y, posteriormente, de los «comandos legales» de la organización. Iparragirre es otra de las integrantes de la cúpula de los presos etarras. Como Antza, cumple condena en la prisión francesa de Lyon.

Según la Policía gala, tanto Antza como Iparragirre formaban parte del «comité ejecutivo» de ETA (como responsables, respectivamente, de los «aparatos político y financiero»), en el seno del cual participaban en la adopción de las «decisiones estratégicas». Antza participó en las negociaciones con el Gobierno de Aznar en 1999 y fue uno de los dos etarras que se entrevistó en enero de 2004 con el entonces vicepresidente de la Generalitat Josep Lluis Carod-Rovira.

La tercera etarra presa en Francia que integra la dirección de los presos es Lorentxa Gimon (Angelu, 1969), ex responsable del «aparato logístico» de ETA y encarcelada desde hace nueve años en la prisión gala de Rennes, donde cumple su condena a 17 años de cárcel. Gimon se forjó en la organización juvenil abertzale Gazteriak (la Harrai francesa) y a finales de los años 90 pasó a la clandestinidad.

La ex jefa del «comando Madrid» Ana Belén Egüés (Tolosa, 1968) es la más veterana de esta cúpula de los presos (donde ya figuraba en 2006). Su condena suma más de 1.000 años de prisión, entre otros por el intento de asesinato del ex secretario general de Política Científica Juan Junquera en 2001, y la cumple en Botafuego (Algeciras).

Otro etarra encarcelado en España, Xabier Alegria (Lezo, 1958) –condenado a 18 años de cárcel como dirigente de ETA– forma parte de la dirección del EPPK. Histórico responsable de KAS y de la Mesa Nacional de HB, está en prisión desde 2007. El último integrante es Jon Olarra Guridi (San Sebastián, 1967), sustituyó a «Txapote» al frente de ETA en 2001 y fue detenido en septiembre de 2002. Ha sido condenado a cientos de años por varios asesinatos.